¿Cómo será mi bebé? El juego de la genética
Cuando estás embarazada pasas mucho tiempo pensando. Pensar en cómo será mi bebé o a quién se parecerá al combinar nuestros genes es de los pensamientos más amables en los que podía ocupar mi tiempo.
Porque, para ser sincera, la mayor parte del tiempo mis pensamientos eran de incertidumbre y preocupación. Que he tenido mis razones pero, aún así, pensar en cosas más banales me venía genial.
Las leyes de Mendel y la genética
Aunque yo soy de letras de convicción, hay muchos temas de la rama de ciencias que siempre me han encantado.
El de las leyes de Mendel es uno de los que más disfruté en la escuela y de las pocas cosas de las que aún me acuerdo bastante.
Mendel era un señor que se dedicó a juntar guisantitos y gracias a ello nos dejó una enorme contribución a la humanidad: entender cómo funciona esto de la genética. En realidad, como sucede con muchos descubrimientos, no fue hasta varias décadas después en las que se desarrollaron las bases de su trabajo. Pero igualmente le reconocemos como padre de esta rama de la biología que ha servido para aclarar tantas incógnitas y que abre tantos caminos interesantes.
Qué dice la genética sobre nuestros rasgos
La genética es un campo apasionante y muy extenso del que yo solo entiendo algunas cosas de modo muy superficial.
En los que respecta a la reproducción humana, hay algunas cosas que tengo claras sobre cómo heredamos de nuestra familia nuestro aspecto, nuestra forma de ser, incluso nuestra tendencia a padecer o no determinadas enfermedades.
Resumiendo mucho, debemos saber que cada persona heredamos dos «copias» (alelos) de cada gen: una copia de nuestra madre y una copia de nuestro padre.
Los alelos no son iguales:
- Unos son dominantes, aquellos que se imponen siempre frente a otro alelo distinto. Basta con que aquella un alelo dominante para que se muestre esa característica.
- Otros son recesivos, lo que significa que para que puedan manifestarse necesitan de dos copias.
Son alelos dominantes:
- Los del pelo oscuro.
- Los del pelo rizado.
- Los de los ojos marrones.
- Los del color más oscuro de la piel.
- Los de los grupos sanguíneos A y B.
Son alelos receptivos:
- Los del pelo liso.
- Los colores de pelo rubio y pelirrojo.
- Los ojos de color azul.
- El grupo sanguíneo 0.
- El color claro de piel.
Así que esto es, a grosso modo, lo que explica a quién nos parecemos y a quién se parecerán nuestros hijos.
También habría que tener en cuenta que algunas características físicas son el resultado de variantes de más de un gen y que en muchas de ellas influye el ambiente al que estamos expuestos durante nuestra infancia.
En fin, que podemos hacer cábalas pero siempre teniendo claro que hay un componente de «azar» que no podemos controlar. Obviamente dos padres rubios van a tener un hijo rubio porque para ser rubios son portadores ambos de alelos de pelo rubio. Pero incluso el tono puede ser diferente en este bebé con respecto a sus padres.
Entendiendo que cada persona recibimos un alelo de nuestro padre y otro de nuestra madre y dependiendo de si estos son dominantes o recesivos podemos explicar que a veces se hereden rasgos «sorprendentes» o que los nietos se parezcan más a sus abuelos que a sus padres, por poner un ejemplo.
Otros factores
Además de la genética, ten en cuenta que lo que determinará a quién se parecerá tu bebé también se verá influido por factores externos y ambientales.
La aportación genética del padre y madre son importantes, mucho, pero también lo son estos factores, que marcarán el desarrollo de tu hijo.
Mis «predicciones»
Como a mi este tema me gusta mucho, le di bastantes vueltas, sobre todo embarazada del Mayor.
Veamos lo que les aportábamos nosotros a nuestros hijos:
- Rama materna: Yo soy rubia, de piel muy clara, y tengo los ojos oscuros. En mi familia hay más rubios de piel clara o muy clara como yo, pero mi madre es bastante morena (de piel, de pelo y de ojos). Mi padre tiene los ojos verde claro y mi abuelo materno los tenía azules.
- Rama paterna: Mi marido es de pelo moreno (pero era rubio de mayor), tiene los ojos verde-miel y la piel clara (aunque no tan clara como yo). En su familia no hay ningún rubio que sepamos y algunos tienen la piel bastante tostada. Uno de sus abuelos tenía los ojos azules.
¿Cómo podrían salir nuestros hijos?
Según mis cálculos, casi cualquier opción era posible:
- En cuanto al pelo, yo veía muy claro que mis hijos iban a tener el cabello oscuro, porque mi gen recesivo no iba a ser suficiente aportación.
- En cuanto a la piel, sí que pensaba que tendrían la piel clara porque nosotros la tenemos así, y aunque esos genes son recesivos, al aportar dos, «ganaría» la piel clara.
- Los ojos me causaban más dudas, porque en nuestras familias había un poco de todo. En cualquier caso, teniendo yo los ojos marrones muy oscuros, apostaba por mi color marrón o, en todo caso, por algún tono verdoso no demasiado claro.
En definitiva, que, mirando sobre todo a mi familia política, no descartaba tener hijos de pelo moreno, ojos oscuros y piel más tostada que la mía. Vamos, que no se hubieran parecido a mi en nada 😉
El aspecto heredado de mis hijos
Mis tres hijos son rubios, de piel clara y ojos claros.
Mayor tiene exactamente mi pelo, cosa que no sé si es buena o mala porque el pelo fosco es un auténtico aburrimiento. Pero es así, tiene mi color, mi textura, el pelo fino pero súper abundante, ondulado sobre todo por la zona de la frente… Mi pelo sin lugar a dudas. También tiene mi color de piel porque nuestro blanco fosforescente es inconfundible: esa piel siempre blanquísima que en todo caso se pone roja con el sol y nunca se broncea… pues así somos. Eso sí, a él le están saliendo pequitas por la cara y yo no tengo.
El Mediano nació con el pelo algo más oscuro que su hermano pero en cuanto se le cayó la pelusa y empezó a salir su pelo de verdad se puso rubio blanco transparente. Rubio, rubio, rubio rubísimo. Unido a que tiene los ojos azules, parecía que teníamos un güiri. Con el paso de los años se le ha ido oscureciendo y ahora mismo tiene un rubio más oscuro que el de Mayor y mío. Los ojos los sigue teniendo azules muy claros, con el borde como remarcado. Unos ojos alucinantes. La piel clara también, pero más sonrosada que Mayor y que la mía. Y él si se pone algo moreno.
La Niña nació con el mismo pelito que el Mediano y pero el cabello que le está saliendo ahora yo lo veo súper claro. Veremos a ver con qué tono termina. Es la que menos pelo tiene de sus hermanos así que es pronto para valorar el rubio con el que va a terminar. Vamos, es que con 18 meses seguía muy escasa de pelo. Además de ser la más pelona, es la que tiene los ojos más oscuros, pero no son exactamente marrones sino tirando a verdes… Quizá acaben siendo marrones pero no creo que lleguen a mi tono oscuro, que a mi apenas se me distingue la pupila. Igualmente tiene la piel muy clara. Quizá no tanto como Mayor o como la mía, pero muy muy clarita, más que el Mediano. Digamos que tiene un tono intermedio entre los tres.
Y, ¿a quién se parecen?
En un primer vistazo parece que han salido a mi porque son rubios. Pero yo creo que para nada.
Mi Mayor es clavado a su padre. Pero mucho mucho. Ves fotos de los dos de pequeños y es más que evidente. Pero no sólo eso, se parecen muchísimo en la complexión física y en la forma de ser. Son dos gotas de agua en dos los sentidos.
Mi Mediano no sé a quién se parece, pero yo apuesto por mi abuelo materno, del que ha heredado los ojos azules, la forma de la cabeza, el tipo de pelo y hasta la complexión más ancha y de menor estatura.
De la Pequeña dicen que se parece mucho a mi, yo la verdad que no la veo parecida más allá del pelo pero sí que es cierto que comparando alguna foto de bebés… podría ser, sobre todo conforme va creciendo.
Yo creo que aunque tengan mi pelo, mi aportación genética ha sido escasa 🙂 Les veo muchísimo más parecido a su padre, la verdad.
Combinando fotos para saber cómo será tu bebé
Si tienes un poco de maña con los programadas adecuados, hay quien es capaz de hacerse un fotomontaje a partir de las fotos de los padres. Qué envidia la gente tan apañada.
Pero tampoco hace falta complicarse. Si quieres jugar un poco, en Google puedes encontrar webs que te permiten aventurar cómo será tu bebé simplemente combinando fotos vuestras. Una de las más conocidas, y además gratis, es MorphThing.com. Simplemente subes una foto de frente de cada uno y en dos segundos puedes empezar a crear combinaciones de rostros, eligiendo además si es niño o niña. Es muy sencilla, en un momento lo tienes, y para pasar un rato está bien. Tenía que haber guardado yo alguno de los resultados para después comparar. Pero, vamos, que no deja de ser un entretenimiento, sin más.
Apps gratis para averiguar a quién se parecerá tu bebé
Si lo tuyo es el móvil, tanto en Google Play como en la App Store hay apps para descubrir cuál será el rostro del futuro bebé.
Estas apps gratis para averiguar a quién se parecerá tu bebé son juegos, que normalmente se basan en combinar fotos online.
Embarazada del Mediano me bajé una y la verdad es que era bastante mala, las posibles caras quedaban fatal y todas las funciones «interesantes» eran de pago. He estado echando un vistazo para ver si por las opiniones os podía recomendar alguna pero lo que he podido ver es que la gente coincide con mi opinión.
Si conoces alguna app gratuita y que esté bien, déjamelo en los comentarios y edito el post. Así aprendemos todos.
¿Qué enfermedades hereditarias?
Ay, hablar de todo esto está genial pero nuestra herencia genética también influye en si tu bebé heredará algunas afección familiar. Así podría ocurrir con la fibrosis quística, la obesidad o el asma.
Si te preocupa este tema, consulta con tu médico para poder ahondar en el árbol genealógico y ver qué posibilidades tiene tu bebé.
¿Tu te preguntabas cómo sería tu bebé? ¿Hiciste un mini-árbol con vuestros genes para tratar de aventurar cómo sería vuestro hijo físicamente? ¡Cuéntame, es muy interesante!
Yo también me lo preguntaba pero no se me ocurrió hacer nada de eso. Yo pensaba que mi hijo saldría con el pelo super negro como su padre, pero no salió pelón y rubito, y cada vez le veo el pelo más claro y ya tiene dos años. A parte del pelo, el niño es un calco total a su padre, pero tiene el carácter que tenía yo a su edad. La verdad es que salió todo al revés de como yo me lo había imaginado en el embarazo,jajaja.
Jajajaja ¡Qué cosas tiene la genética!
Estas cosas son una lotería. Padre: ojos verdes oscuros. Madre: ojos verdes claros (dos genes recesivos, pero 2). Niños: ambos con ojos marrones oscuros!!! Mendel se está riendo de nosotros!!! jajaja
¡Ya veo! Al final nunca se sabe 🙂
Que intriga! La verdad que es toda una lotería, pero no deja de ser divertido 🙂