La maternidad en el armario
En los últimos meses se me ha hecho imposible escribir un post en el blog. No por falta de tiempo, que eso va por descontado, sino por el tapón emocional que siento. Por no escribir el post que escribo hoy no me veía capaz de escribir ninguna otra cosa. Pero, como ocurre con cualquier tapón, la carga se va acumulando hasta que llega el día que necesariamente tienes que reventar.
Tras analizar en las últimas semanas por qué era incapaz de escribir una sola línea que no tratara del tema de hoy, me he dado cuenta que cada cual digiere sus dificultades a su modo y el mio últimamente es el del silencio. Silencio no sólo aquí sino en mi casa y con cualquier persona de mi entorno. Por no molestar, por no ser pesada, por no aburrir, por no parecer de un pesimismo que realmente no me define, por no dar que hablar…
Mi maternidad ha ido metiéndose dentro del armario hasta un punto en el que apenas puedo salir de él sin enseñar demasiado mi debilidad, mi agotamiento y mi frustración. Entonces, para no salir más herida, para no sentir más incomprensión, para no dar lugar a malos entendidos, para no culpar a nadie, me he metido dentro del armario, he puesto punto en boca y a intentar tirar con lo puesto mientras campeo el temporal.
¿Por qué hoy? Por coincidencias. Hace unos pocos días surgió una conversación inesperada con otra mamá, una de esas conversaciones que para nada te esperas. Tuvimos un encuentro de esos en que dos personas se reconocen casi sin hablar y se atreven a sacar de sus armarios dos maternidades dolorosas y poco compartidas. Esta mañana también, a través de una red social, veía como una mamá expresaba algo similar, y he pensado que quizá a mi me había llegado ya la hora, no sé si de salir del armario, pero sí de decir: hola, aquí estoy, me he metido aquí con mi maternidad a esperar a que lleguen tiempos mejores.
Hay realidades que son dolorosas, hay maternidades muy dolorosas. Y no son pocas, no, es que suelen ser maternidades invisibles.
Hay realidades que, cuando las compartes, recibes apoyo y patadas a partes iguales. Y la maternidad es un tema hiper sensible, que cualquiera puede aprovechar para hacerte daño. Hace unos días recibí un mensaje de una persona que, al hilo de un post delicadísimo de este blog, todo lo que tenía que decir es que yo no debía haber tenido nunca hijos pero que lamentablemente hasta las perras pueden tenerlos. Así, tal cual. Porque hij@s de puta hay muchos en el mundo, pero en Internet mejor ni hablamos.
Pienso que es fácil explicar las cosas bonitas, hablar del amor que sientes, de cómo te ha cambiado la vida (para bien), de subir fotos de casas de inspiración nórdica en las que hasta los juguetes van a juego con la decoración o de atardeceres espectaculares o de manualidades chulísimas que tu sola has inventado. Es la clase de cosas que apetece compartir. Pero es complicado decir que lo estás pasando mal, no sólo ya por el hecho en si de reconocer tu propia debilidad sino porque parece que ser feliz es obligatorio cuando eres madre (sobre todo si eres madre reciente) y porque, para qué negarlo, tienes miedo de que entiendan lo que no estás diciendo. Tienes miedo de que piensen mal de ti, de que piensen mal de tus hijos. Tienes miedo de todo y por eso callas.
Pues bien, aquí estoy hoy destapando el tapón para poder seguir adelante: Los últimos dos años y medio están siendo muy duros. Desde que nació Bebé todo se ha puesto patas arriba y aún no ha vuelto a su sitio. Pasan los meses, pasan los años, y esto no rueda, las cosas siguen sin encajar. Nos han pasado muchas cosas, por desgracia cosas malas o regulares que no puedo compartir, y la demanda de mis hijos que no ha parado de crecer. Es un cóctel tremendamente explosivo cuando se te acumulan tantas cosas.
La vida con un bebé de alta demanda de dos años y cinco meses es devastadora. Su kakadrama me está quitando lo poco que me quedaba de paciencia y de cordura, es la gota que colma un vaso que ya de por si estaba al límite. Con Bebé no se puede hacer vida normal porque todo gira en torno a él y ahora, muy especialmente, en torno a su kakadrama.
Súmale atender a otro niño intenso, las preocupaciones lógicas de ganarse la vida con un negocio propio y otros problemas de adultos nada banales.
Prefiero el silencio, todo al armario. ¿Qué le vas a contar a la gente? Y ¿para qué?
Las ideas que se te ocurren cuando estás a solas con tu maternidad en el armario son todas imposibles de compartir con nadie que no haya estado dentro alguna vez. Pienso que quizá no soy la madre que mis hijos necesitan. Que debería estar repleta de energía y de ideas creativas para tenerles entretenidos y felices. Que debo ser realmente inútil para no ser capaz de proponer actividades para que dos niños tan pequeños puedan estar juntos y a gusto, sin pelearse constantemente, sin tirar cosas, sin romper cosas, sin gritar todo el tiempo. Que solo una persona verdaderamente desastrosa sería incapaz de encontrar un momento para ducharse o para hacer la comida cuando su hijo pequeño tiene ya dos años y pico. Que como algunos psicólogos dicen que los niños son nuestro reflejo, seguramente el kakadrama sea un fiel reflejo de lo mal que lo hago todo, de mi falta de paciencia, de mi falta de herramientas para hacerlo mejor, de mi agotamiento físico y mental, de mis ganas crecientes de salir corriendo. Que todo es culpa mía. Que soy una fracasada.
Y aunque a veces te chocas por accidente con otra mamá que está viviendo algo similar y te sientes menos estúpida y menos juzgada, te vas a casa y sigues sintiéndote una mierda, así que te vuelves con tu maternidad al armario y cierras la puerta, a ver si cuando vuelvas a abrir ha pasado todo.
Foto | Hans Vink en Flickr CC
Buff… qué duro. Es duro que lleves tanto tiempo sintiéndote así, por la razón que sea, ahí no entro. Entiendo lo que cuentas de meterse en el armario, porque hay veces que no apetece nada compartir sensaciones frustrantes, sobre todo para evitar los juicios ajenos, que no sirven más que para echar mierda encima (menuda elementa la que te hizo ese comentario tan destructor y de mal gusto… señal inequívoca de que no se ha leído tu blog con detenimiento).
Espero que dentro de poco salgas con fuerzas renovadas, que destierres de tu mente esa idea de que no eres la mejor madre para tus hijos porque sin duda lo eres y de que encuentres la energía y la fuerza para salir adelante.
Un abrazo inmenso.
Otro para ti Mo, siempre estás ahí 🙂
Hola:
Un abrazo muy fuerte. Poco te puedo decir que estás es una época complicada. Que los gritos y los dramas son tremendos en todas las familias. Que encima cuando te vienen mal dadas de otros frentes se te junta todo y ya no sabes por donde escapar. Que es normal que te sientas superada y estancada. Yo más de una vez he cogido la puerta y me he marchado para escapar de todo después de sentirme superada.
Así que te renuevo mi abrazo y mis ánimos para seguir adelante. Seguro que la marea está a punto de cambiar.
Hola Eloísa, te lo agradezco muchísimo y recojo ese abrazo encantadísima. Otro para ti.
Eva lo siento mucho. Mi maternidad está llena de sombras y tristezas. No me identifico con esas madres tan felices y tan contentas con su situación. Tampoco soy de las madres creativas, ni pacientes, ni maravillosas.
Siento que no hayas sentido que pudieras desahogarte con alguien para quizás sentirte algo comprendida. Hago todo lo que puedo por sentir con los pequeños momentos que Lola me ofrece y con los que puedo disfrutar algo. Eva, si necesitas algo dimelo. Yo voy a un grupo de madres para charlar de estas cosas. Un beso bonita
Gracias a ti, Pilar, de verdad de la buena 🙂
Querida compañera de maternidad; cómo te entiendo!!! Antes de nada, decirte que tú eres la mejor madre que pueden tener tus hijos porque, si no lo fueras, no estarías tan preocupada por ellos.
Yo siempre suelo decir que la maternidad saca lo mejor pero también lo peor de cada un@, no sólo de las mamás…
A mí me pasó un poco con mi tercera hija pero te sientes sola porque se supone que ya tienes experiencia y ya sabes capear todos los temas de maternidad. Ilusos!!! Qué poco se sabe del tema. Cada hijo trae unas cosas y no tienen porqué ser iguales a los otros que ya tienes.
Yo tengo tres hijos de alta demanda, de bebé y de mayores.
Si a todo eso sumas la pérdida de Abuelo y, a los cuatro meses, problemas de salud muy serios de Papá y amenazas reales de pérdida de trabajo ya tienes un cóctel explosivo que, o te mete en un armario o explotas como la bomba de Hiroshima y la onda expansiva se lleva todo a su paso. Yo también opté por meterme en el armario y, hoy, dos años y medio más tarde, puedo empezar a contar el tiempo tan devastador que viví. Física y psicológicamente.
Tú has decidido dar el paso de empezar a explicar lo que te pasa y eso es positivo. Contarlo no te hace frágil. Sólo los idiotas piensan semejante cosa!!! Contarlo te ayuda a analizar los problemas, colocarlos en su sitio y darles su justa medida. Habla con otras mamás y crea corriente, haz un grupo donde cada cuál queme sus demonios. Verás cómo no estás sola.
La maternidad es un camino de rosas con espinas y quien diga lo contrario no es de este mundo.
Muchísimas gracias Olga, te entiendo muy bien y te mando un gran abrazo.
Eva……ufff!!! Cuánto siento leer esto…..Me leí tu blog desde el principio cuando estaba embarazada… Me has dado información, opiniones, entrar en el mundo de los blog….me ayudaste con nuestra mochila….. Y ahora no sé qué decirte……. Que ojalá todo pase pronto… Q deseo de corazón q la cosa mejore…. Q te mando un enorme abrazo….
Me alegra haberte ayudado, ahora la mochila la llevo yo 🙂 Pero no pasa nada, al final estas cosas nos hacen más fuertes! Besos.
Mucho ánimo, mucha suerte, no se muy bien que aconsejarte o decirte pero quería escribirte algo, se que es dificil pero piensa en tí, cuidate tu, saca tiempo para algo que te guste, si uno no esta bien no puedo cuidar, te he leído y me he acordado de las charlas que dan en mi trabajo a los familiares sobre el sindrome del cuidador quemado, ponte en algún momento del día tu primero. Y no, no eres mala madre, así que no te lo repitas. Un abrazo
Sí, yo también llevo tiempo pensando que tengo ese síndrome… quien cuida al cuidador?
Eva, cariño, mucha fuerza y mucho ánimo, q eres una madraza y estate ahí, a veces fuerte, aveces flaquea pero mirando hacia delante. Besos mil guapa.
Besos Tamara.
¿Una fracasada? A mí me parece todo lo contrario. No te olvides de todo el mérito que tienes por haber elegido un tipo de maternidad diferente, que desgasta mucho más que otras. Has puesto en marcha un negocio relacionado con ella. Has creado un blog que nos ayuda a mucha gente. Y sobre todo eres una madre comprometida, la mejor para tus hijos. Desde el armario a veces sólo se ve la oscuridad pero en cuanto puedas salir fuera verás todo lo que vales. Un abrazo y mucha fuerza.
Es verdad, Sara, creo que llevas mucha razón. Te mando un gran abrazo.
Hola Eva:
Ya no recuerdo cuando empecé a seguir tu blog pero sé que me gustó enseguida. Me pilló en una época en la que ya no comentaba en los blogs que leía, y menos en los de maternidad (porque en ese momento no tenía hijos). Tu blog me ha ayudado mucho, he aprendido, me he emocionado con los logros de Mayor y Bebé… pero nunca he comentado. Lo hago ahora porque espero que mis palabras puedan ayudarte por un momento a llevar un poco mejor esta situación tan dura por la que estás pasando. Ninguna madre es perfecta pero casi todas las madres (aquí no incluyo a la loca que te ha mandado ese mail tan malintencionado) somos todo lo buenas que podemos ser en las circunstancias que nos han tocado. ¿Podríamos ser más pacientes, más comprensivas, más creativas, más…? A lo mejor, si nos tocasen otras cartas en la vida. Pero lo que no podemos olvidar nunca es que somos seres humanos, no robots.
Espero que veas pronto luz al final de ese túnel en el que estás. Te mando un abrazo muy fuerte y mi apoyo, aunque sea virtual.
Gracias por tu apoyo virtual Raquel, te lo agradezco mucho.
Qué gran post. Muchas gracias por compartir también esto. Has sido muy valiente. Un abrazo fuerte.
Muchas gracias Patricia, un besazo.
¡Nada de fracasada! Ni mucho menos, hombre ya! Eres la mejor madre del mundo para tus hijos, esto no significa que sea todo facilísimo, en ese caso no tendría tanto mérito. Nadie les quiere como tu, nadie se sacrifica por ellos como tu, nadie haría por ellos lo que harías tu.
Siento que hay gente tan cabrona para decir esas cosas tan feas amparandose en el anonimato, eso a la cara no tendría valor para decirtelo. ¡Pero no cometas el error de creerte la mierda que te haya soltado!
Muchas estamos en armarios parecidos, así que, salvando las distancias porque cada caso es único, podemos entenderte. A mi a veces se me pasa el día sin encontrar un momento para hacerme una simple coleta. Otras veces me he dado cuenta por la noche que no he bebido nada en todo el día.
No estás sola, ni de lejos, pero estas cosas no se dicen porque ¿a quién le dices algo así? A mi no me entiende ni mi marido y eso que vive conmigo.
PD Perdón por el taco pero no quiero quitarlo :/
No lo quites, no lo quites 🙂
Un gran abrazo, guapa, y muchos besos.
Jo,como te entiendo!! Reconforta saber que no solo yo me siento así…He leído tu post y he tenido la sensación de que había sido yo la que lo escribió. Mucho ánimo pq hay muchas mamás que nos sentimos así, cada una lo lleva lo mejor que podemos,adoramos a nuestros hijos pq son por los que nos levantamos cada día. Pero a la misma vez todo nos hace que no tengamos ganas de levantarnos… Los hijos nos dan mucho pero también nos quitan,eso es así. Me encanta leerte,eres una súper mamá desde mi punto de vista,así que palante,sal del armario y sigue el camino,pq todo pasa, solo son etapas a cual mas difícil.
Muchas gracias Rocio, un gran abrazo para ti.
Pues a mí me pillas en un momento muy bajo también. Mi maternidad también ha arrasado conmigo, mi segunda maternidad, además. Ser familia de 4 con dos niños tan pequeños y tan demandantes nos ha descolocado tanto que no sé dónde vamos a terminar. Y a veces si releo mi blog me deprimo, jajaja!! Pero qué se le va a hacer, me salen mejor los post tristes o serios o de preocupaciones, es lo que me apetece compartir aquí y lo que me ayuda.
Yo elijo cómo criar, al igual que has hecho tú. Hacemos lo que queremos y lo que podemos. No te sientas culpable, no merece la pena. No te lo mereces.
Esto pasará, seguro.
Mucho mucho ánimo.
Bichilla, para nosotros ha sido durísimo. Y es complicado decirlo en voz alta porque parece que estás culpando a Bebé y no es eso, es simplemente reconocer que antes de su nacimiento teníamos una vida ordenada y feliz y ahora todo es un descontrol, pero bueno, es lo que ha tocado vivir, Bebé es como es, también nos han pasado otras cosas que igualmente nos podrían haber pasado si hubiéramos seguido siendo tres… En fin, que no elegimos la vida que nos toca vivir. Yo, a pesar de lo que puedan pensar algunos, sigo contenta con la forma de vivir que hemos elegido y sigo pensando que es la mejor opción. Todo terminará por encajar, estoy segura, la cuestión es sobrevivir a esto 🙂 Un besazo.
Eva, tan sólo leyendo este post cualquiera se da cuenta de lo implicada que estás en tu maternidad. Eres la mejor madre que pueden tener tus hijos. Verás que esto se pasará cuando menos lo esperes.
Un grupo de madres de apoyo o algo de ayuda de abuelos, tíos o amigos, te vendría genial para respirar.
Ánimo, vales mucho. Y si te consuela, aquí hay otra madre de dos que te entiende muuuucho.
millones de besabrazos.
Lo se, Mar, no soy yo la única pasando por una maternidad así de complicada. Te agradezco mucho tus ánimos.
Uff cómo te entiendo. No tengo casi nada que añadir a lo que te han dicho, sólo que muchos muchos ánimos. Yo soy monoparental, por elección, y lo estoy pasando muy muy mal. Y de todas formas volvería a tener a mi hija, a pesar de todo. Lo hacemos lo mejor que podemos, y con los bebés de alta demanda hay tanta incomprensión, pero tanta! Un abrazo muy fuerte!
Besazo para ti!
Hola guapa, debo decirte que a mi también me dan un poco de miedo esas madres que jamás se sienten desbordadas, que no necesitan tiempo para ellas sino que todo su tiempo sus ganas e intenciones giran entorno a sus hijos. No se si será porque tuve a mi hija sola desde el comienzo, pero yo me he sentido así muchas veces lo cual no quita que mi hija sea lo mejor que me ha pasado en la vida, lo que más amo y adoro. Cuando voy a los cumples del cole, veo a esas madres, tan estupendas que se mueren por darle todo a sus hijos, que se desviven porque no se caigan, porque no tengan mocos, porque no se manchen, que digo… debo ser la peor madre del mundo. Lo he pensado tantas veces… Yo no me veo en ellas. Porque si mi hija se cae no corro a toda velocidad para levantarla sino que le digo anda gordita «parriba», que le si tiene mocos se los limpio y «palante», y si se mancha pues «a la lavadora y punto». Por otro lado, las veo a ella que le dedican todo el tiempo como dije antes a sus hij@s, yo con todo el dolor de mi corazón, tengo aficiones por ejemplo bailo salsa y seguiré haciendolo, porque si no lo hiciera, entonces si que me volvería loca, es verdad que para esto (como ya he dicho soy madre soltera) necesito ayuda y que me la cuidan mientras yo practico mi afición, a veces me siento egoista y mal, pero se que para seguir amandola como lo hago debo hacerlo, sino me sentiría peor que si no la dejase para hacerlo, porque cuando bailo renuevo mis energías y después de esto puedo ir a estar con mi hija con más animos y fuerzas. Otras veces simplemente me la llevo a mis clases, en vez de llevarla al parque (y aunque por allí hay niños con los que puede jugar, jamás es lo mismo que llevarla al parque) y me vuelvo a sentir mal. Y hay mucho más, soy desordenada, mi casa casi nunca resplandece como la de las demás mamás, sólo intento que no esté demasiado desordenada pero a veces le digo a mi niña, uff cariño la casa está fatal hay que recogerla, pero es verdad que jamás dejaría entrar por sorpresa a una de esas supermamás del cole, creo que se asustarían. En fin… con esto quiero decir que todos tenemos muchas cositas, y es que tener hijos nos hace muy exigente con nosotros mismos y a veces olvidamos que ellos nos quieren tal y como somos. Que lo que más necesitan de nosotros es amor, y que lo demás es secundario.
Muchas gracias por compartir tu experiencia Sandra, me he sentido muy identificada. Un besazo.
Ante todo, gracias por compartir públicamente lo que estás pasando, porque te aseguro que a muchas nos ayuda, y mucho. Aunque yo solo tengo un hijo, que en diciembre cumplirá tres años, me he sentido muy identificada contigo. Mi niño también es tremendamente demandante, para ducharme tranquila no basta con que esté papá en casa (casi es peor) sino que lo mejor es conseguir que se quede en el parque (y esto desde hace unos pocos meses nada más) y marchar yo sola para casa… o esperar a que se duerma. Soy incapaz de cocinar a pesar de la edad de mi hijo, y también espero el momento en que esté ya dormido (benditas siestas…) para intentar hacer algo medio rápido (el resto mi marido, y a diario como con mi madre). Como madre primeriza me he sentido, y todavía hoy, anoche en concreto, frustrada y a veces desencantada porque parece que las cosas no acaban de mejorar. Y si a eso le sumamos que trabajo fuera, y cada día debo dejarle con mi madre para que le lleve al cole, y por la tarde le recojo media hora más tarde de haber salido del cole…
Anoche, después de hora y cuarto con la luz apagada por fin se durmió. Había echado tan solo una hora de siesta, y a pesar de mis esfuerzos por llevarle pronto a la cama, debatiéndome entre dejarle jugar un poco, o leer un cuento, y apagar cuanto antes la luz sabiendo que le cuesta coger el sueño… eran las nueve y media cuando se durmió, y para esa hora no había podido evitar, desesperada, gritarle «que te estés quieto de una vez», «que hay que dormir», «que me dejes dormir de una vez»… Y salí frustrada, triste pensando que para poco tiempo que estamos juntos parece que tiene una madre ogro, que pasa la tarde diciéndole venga que hay que ir a la cama, y enchufándole un vídeo para poder cenar mínimamente (mientras mi marido no entiende por qué no puedo comer además del pescado una pequeña ensalada… lo siento pero no me da tiempo), y que en poco tiempo a pesar de ser su madre va a preferir estar con la abuela que al menos parece que tiene más paciencia que su madre.
Así que gracias una vez más Eva, te echaba de menos pero por otros post como el del sueño imaginaba que algo así te estaba ocurriendo. Mucha fuerza y mucho ánimo, y esperemos que en unos meses, con los tres años de tu peque, de verdad se note una mejoría.
Hola Laura, te entiendo muy bien. Estoy segura de que en torno a los tres años vamos a notar cierta mejoría, es una edad a la que cambian mucho. Un gran abrazo.
Cuanto siento q no hayas utilizado el blog para sacar dentro de tí todo eso q tanto daño te está haciendo, olvídate de los trolls, simplemente se borran sus comentarios y a otro cosa, q el tiempo es oro, no hace daño quien quiere, sino quien puede, así q no les dejes.
La maternidad no es fácil, ni un camino de rosas, ni siquiera para las q tienen niñera, cocinera, mayordordomo, … ahí tienes a la princesa Catalina (AKA Kate Middleton) q ha confesado q lo pasó fatal con los continuos despertares nocturnos de su primer hijo.
No te tortures de esa manera, todas y ninguna somos la mejor madre del mundo, según el día y el momento, esto no es un título a conseguir, ¿alguien se plantea quien es el mejor hijo o el mejor padre del mundo? pues entonces nosotras no tenemos porqué entrar al trapo de esa «competición».
Sabes q tenemos vidas paralelas con nuestros dos hijos pequeños, el tuyo niño, la mía niña, pero ambos muy exigentes y absorventes con nuestro tiempo y nuestras energías, estos 2 años y 5 meses están siendo agotadores, tú trabajando desde casa, yo pasando más horas de las que me gustaría en la oficina.
No sé q piedras estás teniendo en tu camino, en mi caso es la falta de un trabajo decente y justo para mi marido y su familia más cercana, sus padres y su hermana q quiero pensar no son conscientes al 100% del daño que nos están haciendo.
Todos tenemos derecho a nuestro momento, a nuestro tiempo, aunque sólo sea a una ducha tranquila de 5 minutos… ¡benditos 5 minutos!
Yo también grito y me desespero…suspiro por una siesta tranquila o por ver una serie con mi marido, hechos un ovillo en el sofá…
Quizá lo q nos pasó el otro día te pueda servir de ayuda… era sábado, ya habíamos cenado y los peques estaban especialmente guerreros, se sienten con poder de decisión absoluto sobre lo q se ve en la tv, haciendo zapping, apareció en un canal ponían un programa de viajes, Italia: Roma, Venecia, Florencia… nuestro viaje de novios, los peques no estaban dispuestos a ceder, todo eran gritos, pataleos … y no pude más!!! los eché del salón, les dije q mamá también tenía derecho a ver la tv, mamá limpia, cocina, lava, plancha, va a trabajar y ellos nunca se cansaban de pedir, de EXIGIR. Los «abandoné» en el pasillo y cerré la puerta del salón para disfutar del programa o quizá de nuestros propios recuerdos recorriendo de la mano los lugares q aparecían. De repente ocurrió el milagro! dejaron de patalear, cogieron el DVD portátil y se fueron a la cama del mayor, a ver en silencio y sin peleas un DVD de dibujos animados.
No eres mala madre y por supuesto no has fracasado, simplemente la situación te está empezando a superar, así q párate y respira, tenemos q ser capaces de enseñar a nuestros hijos q nosotras también necesitamos amor, comprensión…
Cuidate mucho, vale?
Un abrazo!
Hola Chitin, no sabía lo de Kate, la verdad que me sorprende un poco porque pensaba que esta gente contaba con apoyo por las noches, no me la imagino metiendo a su bebé en su cama, pero mira, si es así estupendo, es una chica que me cae muy bien y lo poco que se de ella me parece sensata. Yo conozco a una familia que tiene apoyos de todo tipo y aunque sus hijos son también «tela» su vida y la nuestra no tiene absolutamente nada que ver. Yo te aseguro que si tuviera servicio y niñera, un jardin para que corrieran, familia en la que confiar… estaría mucho más descansada física y mentalmente, pero oye, a cada uno nos ha tocado vivir unas circunstancias y no hay más.
Gracias por compartir ese momento, la verdad es que los niños a veces nos sorprenden cuando menos lo esperamos. Yo he tenido también algún momento de «mandarles a freir espárragos» y al final se han terminado apañando y además muy bien, pero han sido momentos en que hemos alcanzado previamente unas cotas de estrés tremendas…
En fin, como he dicho más arriba, esto es lo que hay y con esto hay que tirar para adelante.
Un besazo.
Un abrazo muy muy fuerte. Yo tampoco soy creativa, ni paciente, ni muchas cosas, grito y luego me siento mal, tenemos rachas buenas, medio buenas, y no buenas (ahora mismo estamos en una no buena, en la que los niños no paran de pelearse).
Un beso
Ester
Que los niños no paren de pelearse me estresa muchísimo, no sé cómo lo llevas tú pero para mi es… de lo peorcito del día a día!
Te entiendo, y no te voy a decir que salgas de se armario a la de ya, porque también sé que todo el mundo necesita (o por lo menos yo lo necesito) su momento para lamerse las heridas a solas y sin que nadie te juzgue ni te diga nada. Pero sí te digo, que estoy segurísima de que eres la mejor madre que tus hijos pueden tener y que tienen suerte de que de todas las madres del mundo tú seas la suya. Así que cuando puedas o decidas salir de ese armario, espero que lo hagas con energías renovadas, con fuerzas para comerte el mundo, y con unos tapones para ignorar a la gente mala, ignorante y cobarde que no tiene reparos en dar puñaladas amparándose en el anonimato de internet…
Un beso muy muy grande! 🙂
NO suelo dejar comentarios en los post, pero simplemente queria darte mi apoyo incondicional, a mi me ha servido de gran ayuda leerte como mama primeriza que soy,
yo tampoco soy una mama perfecta de las que salen en los anuncios, sus hijos nacen durmiendo 12 horas seguidas y todos ingenieros y hablando 40 idiomas , les da tiempo a trabajar a hacer cupcakes, manualidades y no pierden nunca los nervios
NO te desmoralices, hay gente muy mala, criticar es muy muy facil y cada uno es cada uno y tus circunstancias son las tuyas propias y eso mejor que tu no lo entiende nadie,
Me alegra que sigas teniendo la sinceridad que les falta a muchas madres y que plantees problemas dudas o miedos que muchas tenemos,
y quien no quiera que no te lea, pero que deje a los demas disfrutar con tu blog y sentirse apoyada
Te agradezco mucho tu comentario, de corazón. Cualquier cosa que necesites, aquí me tienes.
No estás sola… o mejor dicho sí, pensándolo bien estamos muy solas y por eso cuesta tanto hablar de estas cosas. Te leo y se me caen la lágrimas…
Que duro es esto, o que mala madre soy para no poder sacarlo adelante como parece que hacen todas con tanta normalidad. Ese pensamiento me ronda desde hace casi dos años, y cada vez que saco el paquete de salchichas de la nevera porque no me apetece hacer cena, o cuando no corro a limpiarle el moquito y siempre viene alguna buena madre a recordármelo. La niña ahora duerme, tardó dos años pero yo ya no puedo… he quedado tocada y me despierto a las 3 de la mañana, pero cuando nos levantamos digo «bien, todo bien»… por no aburrir, porque ¿para qué?… he visto, médicos, psicólogos, psiquiatras, neurologos y decidí que ya no mas, no mas opiniones, tiraré con esto como pueda, lloraré en el baño cuando ya no pueda y eseperaré no haberlo hecho tan mal al final del camino… y por supuesto leeré tu blog para sentirme acompañada en mi soledad… Un beso y que todo vaya a mejor…
Hola Valeria, creo que nos entendemos perfectamente, te mando un gran abrazo. Aquí me tienes.
Siento mucho leer por lo que estás pasando y siento saber que lo estás viviendo en soledad. Espero que salgas del armario del todo y encuentres a gente que te comprenda, que te respete y que sea un sostén en el que apoyarte y con lxs que poder hablar de tu maternidad con naturalidad.
Cuídate, porque si tú estás bien tus hijxs también.
Ellxs te han elegido por algo. Sácate la culpa de encima ?
Un abrazo.
Hola Ruth, hago lo que puedo, sobre todo intento hacerme concesiones «físicas» que antes me eran impensables, como echarme la siesta siempre que puedo, porque efectivamente para poder sobrellevar todo esto tengo que estar medianamente bien. Un besazo.
No me gustan los armarios.
No me gustan las maternidades de película rosa, con hijos increíblemente maravillosos, padres-maridos perfectos, madres guapas, profesionales, cariñosas, apañadas… familias y casas de revista. No me gusta porque no me las creo, son todo fachada.
Me gustas tú: honesta, real, triunfadora y GUAPA de verdad, por dentro y por fuera.
Todo mi embarazo tuve miedo a verme como tú. Bien sabes lo poco que dormí los 3 primeros años de mi niño, así que conozco bien ese infierno. Pero es que encima has toreado con todo y todos, y ahí sigues, sin bajar ni la cabeza ni las manos.
Pasará. Creeme que pasará. Y nos reiremos hasta del kakadrama.
Hasta entonces no te rindas, ni dejes de contarme nunca como te sientes, por mucho que me escasee el tiempo siempre me llegará para mandarte un abrazo. Muacks!
Poco puedo decirte porque ya lo sabes todo, que te agradezco mucho que estés ahí a las duras y a las maduras porque no es algo habitual y que valoro mucho tu capacidad de reirte de las complicaciones que nos surgen y de una misma, me gusta tu alegría de vivir y como la contagias. Un besazo amiga.
Creo que andas un poco perdida con esto de la maternidad, a lo largo del tiempo te he ido leyendo y creo que te está superando todo ésto de la lactancia y el colecho, siento decirte que creo que no es tu sitio y que deberías buscarlo de otra forma. Habla con tu pediatra o busca un psicólogo infantil, por tu bien y por el de tu familia. NO me malinterpretes, soy profesional de la salud mental infanto-juvenil y sé lo que digo.
Un saludo
Perdona Ana.. ¿qué pinta un psicólogo infantil aquí? ¿Por qué dices que está «perdida con esto de la maternidad»? Me parece que no has entendido bien, o quizá soy yo la que no entiende.
Me meto (sin ánimo de liarla ni mucho menos) porque la mayoría de las que hemos comentado parece que estamos igual, y no llevamos a los niños a un psicólogo sólo porque sean intensos. Es agotador para nosotras, pero de ahí a mandar a un niño de dos años al psicólogo…
Si me he perdido algo te agradecería que te expliques, en serio.
sólo quiero decir que por el tono de este post y por otros que he ido leyendo, la sensación que da es que está sobrepasada y con las energías por los suelos. Yo no digo que la maternidad sea fácil ni nada de éso, lo que quiero decir es que no es bueno que una madre se sienta así de superada porque éso influye en los hijos y al final es cómo el pez que se muerde la cola, si nosotras no estamos bien, nuestros hijos no pueden estar bien, y así….. todo se complica. Aquí todas comentáis dificultades y normalizáis los problemas, pero los niños en general duermen bien, comen bien y se portan bien ( como niños), y si todo ésto no es así las cosas NO ESTÁN BIEN, aunque por aquí se intente normalizar.
A nivel personal (tengo 2 hijas, y amigos y sobrinos…), sé lo que digo y a nivel profesional también. Trabajo en el área infanto-juvenil.
Yo no estoy diciendo que haya que ir al psicólogo, ni al pediatra, lo que yo digo es que si tenemos que engañar y ocultar nuestras emociones y pensamientos, es porque en el fondo vemos que algo no está bien. Yo intento explicar que no nos tenemos que conformar con que las cosas nos vayan regular o mal, que tenemos derecho a que nos vayan bien y que nuestros hijos tienen derecho a que sus padres estén bien, y no me sirve éso de que los niños son tal o cual, los niños a veces tienen dificultades y los padres no las vemos,normalizamos conductas que no debemos normalizar. Aquí se justifica todo y se normaliza todo y éso es lo que no está bien.
Hay un dicho que utilizo mucho que dice: LO QUE NO MEJORA EMPEORA.
Un abrazo
Me parecen muy atrevidos tus comentarios.
No sé qué niños conoces tú, pero los que yo conozco, que no son pocos, duermen tirando a regular o muy mal, los que duermen bien comen más bien mal, la mayoría comen sólo lo que les gusta a ellos, que no a sus papás, y se portan a veces bien y a veces mal.
Las madres que yo conozco bostezan constantemente, van con unos pelos bastante malos, y muchas estamos enfriadas de octubre a junio (meses escolares)
A eso súmale maridos que no renuncian a sus hobbies y familias que a veces te apoyan en tu forma de criar, a veces no, a veces creen que lo hacen y en realidad desayudan más que ayudan…
Las madres llevamos un peso encima que no es normal. Curramos 8 horas fuera de casa y las otras 16 en casa. Además, como estamos locas perdidas, dormimos con nuestros hijos y los amantamos hasta que van a la universidad, ponemos sus necesidades por encima de las nuestras, y somos una estupendas amantes de nuestros maridos aunque tengamos pelos en las piernas (y en más sitios).
A mi lo que extraña es que no nos explote la cabeza o hagamos combustión espontánea, ¿sobrepasadas? sí, mucho, gracias por la información. ¿Momentos fantasía imáginandonos haciendo un Carmen Martínez Bordiú?, también.
A mi lo que me parece es que tú no eres madre, o dinos por favor cual es el tu secreto para mantener ese equilibrio que yo creo que es de otro planeta .
Pero eso no es todo, porque, alucina con esto, incluso después de lo que te he contado, lo que más nos gusta del mundo es ser madres!!
Y para más inri, no te lo pierdas, nuestros hijos nos adoran!!
No quiero entrar en polémicas ni quiero que nadie se sienta ofnedido, simplemente es que creo que se esa normalizando unamaternidad en la que las necesidades de los niños están por encima de las nuestras y éso no puede ser, tenemos que cuidarnos para poder cuidar, tenemos que estar descansadas para poder enfrentar las jornadas laborales y familiares sin britos y malos humos, y éso puede ser posible, no nos tenemos que conformar con menos. Que no es fácil, ya sé que no, pero vale más invertir tiempo, paciencia y educación en los primeroas meses-años, que arrastrar durante la mayor parte de la infancia malas conductas de nuestros hijos. Si se les enseña a comer de todo y si no, No comen, aprenden, porque la mayoría come bien en el cole y mal en casa (qué casualidad…), y con el sueño pasa lo mismo, un niño que no descansa , no deja descansar y lo peor es que esa irritable, protestón y llorón, y éso no es bueno para él, vale la pena invertir tiempo en que mejore su sueño, y no ir pasando las noches como se puede. Pero claro, llegamos y decimos, que no podemos con todo, que el niño es nervioso, de alta demanda,…el niñoo es lo que es, pero nosotros tenemos mucho que ver en el resultado final. No tengo la receta mágica, aunque pueda parecerlo, pero dejar que pase el tiempo y estar saturadas todo el rato nos genera gran insatisafacción y las cosas no mejoran por generación espontánea, porque ahora son pequeños, pero luego crecen y aparecen otros problemas, en el colegio, las tareas, los amigos….
Si tengo hijos, más bien dos hijas, de 4 y 7 años, trabajo jornada completa fuera de mi casa y luego lo que me queda en casa, mi marido viaja constantmente y no está en casa todo, lo que quisiéramos, mi madre nos echa una mano, pero mis hijas duermen toda la noche desde los 18 meses, comen de todo desde el año e incluso son obedientes (he dedicado muchas horas a enseñarles), no llevan pañal desde los 18 meses y sobre todo SON FELICES, porque se saben regular y éso es importante.
El truco, si es que lo hay, es que descanso sufuciente, tengo vida a parte de la maternidad, tengo las cosas muy claras, tengo sentido común y dedico tiempo a EDUCAR, a mis hijas, si siento que algo no a bien o me supera, me paro a pensar y pido consejo e intento hacerlo de otra manera. Lo que me guía es ir viendo que mis hijas van siendo cada vez más autónomas en sus cosas y más seguras de sí mismas.
Y por si no queda claro, he dormido con mis hijas hasta que he creído que lo, podían hacer solas, ynles he dado, pecho hasta los 15 meses.
Para no querer polemizar lo estás disimulando muy bien. Si algo he defendido en estos cuatro años y pico de blog es que creo en la crianza consciente, en la crianza respetuosa, y que las necesidades de los niños están por encima de las necesidades de los adultos. Que no te parece bien, estupendo, tiene que haber de todo en la viña del Señor, pero no vengas aquí a insultarnos dándonos lecciones de lo bien que lo haces, poniendo la palabra educar en mayúsculas como si fuéramos gilipollitas y no supiéramos lo que es.
Y ahora, por favor, te pido que nos respetes. No tengo nada más que decir.
Saludos.
Completamente de acuerdo, no podías haberlo expresado mejor. Lo que creo que ocurre es que muchas prefieren seguir en el armario, y presumir de hijos de cara a la galería, aunque luego de puertas para adentro, o años más tarde, reconozcan que sus hijos no dormían tan bien, o no comen de todo.
Con lo de maridos que no renuncian a sus hobbies… creo que para muchas de nosotras es la clave, aunque en los blog apenas se hable (y lo entiendo), porque aunque en mi caso ni siquiera sea hobbie, sino que se trata de estudiar para unas oposiciones que no parecen salir nunca, envidio taaaaanto ese tiempo del que dispone para él, mientras día tras día me tiro más de una hora intentando que duerma, con luces apagadas y sin poder hacer nada (salvo esperar y esperar sin quedarme yo también dormida, porque luego hay que planchar, o limpiar…). Y que pueda contestar wasaps, o hablar por teléfono, o lavarse la cara al levantarse sin que tenga a nadie gritando «ama veeeeeeen». Y todo esto unido a mi síndrome premenstrual (que algunos meses, o casi todos, me hace estar hiper sensible…)… pues hace que a veces me parezca que la maternidad vaya a terminar con nuestro matrimonio, porque la más mínima queja por mi parte es entendida como un ataque («y qué quieres que haga yo, como si yo no hiciera nada, no decías que esto era normal…») sin encontrar ese apoyo que tanto necesito. Así que Eva, y a las que aquí dejáis vuestros comentarios, un gracias enorme por hacerme sentir que no estoy sola.
Hola Laura, yo sobre los maridos que no renuncian en la misma medida que nosotras no puedo aportar mucho y no es porque quiera fingir de cara a la galería, es que en nuestro caso las renuncias han sido para los dos. Vamos, que podría poner a parir a mi marido por otras cosas pero no precisamente por eso, nosotros nos repartimos el trabajo en la tienda y los niños y dado que está todo relacionado puedo decir que es más o menos fifty-fifty y que mi marido se ve «afectado» por esto más o menos en la misma medida. Y digo más o menos porque el pequeño realmente con quien quiere estar la mayor parte del tiempo es conmigo por lo que da igual lo dispuesto que esté mi marido que si Bebé no quiere estar con su padre al final la carga no está repartida sino únicamente sobre mis hombros. Obviamente las noches sin dormir me las chupo yo desde hace dos años y medio porque la que da la teta soy yo y como esto otras muchas cosas. Y obviamente cuando Bebé tiene el día malo, que sucede a menudo, la que apenas puede trabajar ni comer ni recoger ni hacer nada soy yo porque es como si su padre fuera invisible y solo existiera yo. Doy las gracias de que mi marido se haya dedicado en cuerpo y alma a nuestra empresa porque si no no hubiera sido capaz de mantenerla con el volumen de trabajo que gracias a Dios tenemos actualmente y doy gracias a Dios de ello porque sin ser autónomos los dos y poder organizarnos libremente de verdad que no sé cómo hubiera hecho para no volverme loca en el día a día.
Gracias a ti Laura, lo mismo te digo.
Lo has clavado Lorena, me has quitado las palabras de la boca… en relación con los padres, su universo paralelo en espacio-tiempo, sus hobbies y la familia. En mi caso han sido los entrenamientos con el equipo de futbol, clases de idiomas, salidas con los amigos, y una familia en la cual de repente parece que son todos pediatras, pedagogos, psicólogos y lo que haga falta con tal de opinar y juzgar. De ahi a la depresión ha habido un paso… y no, no señor, no son las hormonas… son las personas que no ayudan y tiran de las madres hacia abajo con espectativas, críticas, sugerencias y demandas infinitas…
Yo sigo en el camino, batallando con la depresión, el cansancio y la falta de sueño, pero ya es hora de que alguien les dedique unas palabrillas al resto de los miembros de la familia, si no sois capaces de contener y ayudar al menos manteneros al margen…
Bueno Valeria, a veces se mantienen tan al margen que es como no tener familia…
Está claro que todos los bebés, al igual que los adultos, pasamos por etapas. Pero las suyas van más seguidas. En el último post de mi blog he comentado las dos últimas etapas por las que está pasando y aunque los comentarios de personas ajenas sean más contraprudecentes que el propio caso, hay que seguir hacia delante. No queda más remedio que tener mucha paciencia y esperar a que el temporal se calma porque si Mayor lo consiguió, también lo conseguirás con Bebé. Sólo puedo decirte mucho ánimo y que sepas que no estás sola en esto, todos los bebés tienen crisis y todas las madres, en algún momento (o muchos) nos sentimos superadas.
Bueno, yo te puedo decir que Mayor ha sido y es un grandísimo ejemplo de superación y que todos los procesos por los que ha ido pasando, unas veces con ayuda y otras él solo, son dignos de mi mayor admiración. Ha conseguido cosas que yo nunca pensé que conseguiría y te aseguro que para mi es un gran ejemplo a seguir. Sé que Bebé con el tiempo irá siendo más fácil, la dificultad escriba en manejar muchas situaciones complicadas todas al mismo tiempo y prolongadas durante los meses, pero bueno, en ello estamos. Un abrazo.
Hacia mucho que no comentaba en tu blog pero te he seguido puntualmente. Muchas veces me siento como tú. Mi segunda maternidad me esta superando por momentos…… Te entiendo. Yo vivo en una ciudad desde hace año y pico, llegamos sin conocer a nadie ni familia y es muy duro porque es 24 Hrs continuas sin descanso. Así que si tu puedes apóyate en tu entorno y sal poco a poco del armario. Comparte con ellos tus penas e intenta delegar alguna tarea, para poder despejarte de vez en cuando. Eres una madre estupenda, solidaria y valiente por contarnos todo esto. Animo y un besazo Eva!
Hola Bee, es que la segunda maternidad en muchas ocasiones es un cambio brutal. En nuestro caso ha sido así y en otras familias que conocemos también, no es culpar al segundo, simplemente es reconocer la situación. Te mando un gran abrazo, fuerte fuerte.
Un abrazo muy grande, te escribí ayer rápidamente desde el móvil, pero no quería dejar de mandarte mi apoyo. En mi segunda maternidad, hubo un momento determinado que me sentí como tú en este momento. Mi niña pequeña tenía un trastorno de sueño y recuerdo los días y las noches como una nebulosa. Hubo mucho gente a la que perdí por el camino, pero hoy sé que no eran tan «mi gente» como yo creía…
Cuando lo superó, lo superamos, escribí este texto. Aprendí muchísimo de esos días tan duros… hoy día hemos vuelto a dormir todos juntos y apenas se despierta 4 ó 5 veces en la noche. Somos felices, salvo momentos puntuales, claro. Te lo dejo:
http://tigriteando.blogspot.com.es/2014/06/10-cosas-que-aprendi-durante-las-malas.html
Mi mayor también es de alta demanda y tenemos el problema de la caca también, llevamos así 7 meses, cada vez que veo la luz al final del túnel se aleja un poquito más. Sé que lo superaremos. Sé que lo superaréis. Mucha luz hasta que lo consigáis. Un abrazo
¿Crees que la alta demanda está relacionada con el kakadrama? Yo creo que puede tener relación, no me parece casual que mis dos hijos lo hayan pasado (aunque cada uno a su manera).
Muchas gracias por todo Bei.
Sinceramente no lo sé, Eva.
Si que te puedo decir que otra amiga que lleva incluso más tiempo que nosotros con el kkdrama (antes incluso de dejar el pañal ya tenían que darle movicol) también es una niña muy muy intensa, para mi, la niña de mayor alta demanda que conozco.
En mi estupidez pensaba que estas cosas estaban relacionadas con forzar a los pequeños a dejar el pañal y en nuestro caso nada más lejos de la realidad, ni siquiera tuvimos que agilizarlo por el cole porque no está escolarizada…
En el caso de mi niña no es miedo, porque se tira un tiempo fenomenal y luego de repente entra en bucle, tampoco es estreñimiento. Es más una cuestión de hipersensibilidad y tozudez, es muy complejo, ya más o menos consigo entender lo que le pasa, pero eso sólo le resta un 20% de frustración al asunto…si quieres hablamos en profundidad por privado…. Hoy justamente he tenido uno de los momentos más horribles de mi maternidad justo por este tema.
Te mando miles de achuchones.
Si quieres hablar en privado yo encantada, te dejo mi mail: mamacontracorriente@gmail.com, yo estoy convencida de que los niños con este problema tienen muchas cosas en común, por ejemplo la hipersensibilidad y tozudez de la que hablas. Un besazo.
Te mando un abrazo muy fuerte! Te compreendo mucho, como he escrito en el post anterior vivimos el «kakadrama» por un año, es agotador. Tambien me senti dentro de un armario muchas veces, fui juzgada por otras madres, primero porque hice una relactación (para que si los biberones estan ahi para eso?), luego el colecho (eres loca de meter a tu hijo en la cama, él nunca sabrá dormir solo) y despues porque empecé con montessori en casa (es que a ti te van las modas, y estás metiendo a tu hijo en las modas porque quieres atención). A los trolls, borrar y bloquear, si puedes denuncialo (a Facebook, a WordPress). Eres la mejor madre del mundo para tus hijos, ellos te han eligido! Nunca lo olvides. A veces es muy dificil, lo sé, sé muy bien, mi maternidad no es un cuento de hadas tampoco, y es verdad que estamos las madres muy solas y muy desunidas, por desgracia. Un beso grande, y si quieres hablar sobre el kakadrama aqui estoy, que sé muy bien como eso te quita los nervios.
El kakadrama es de las situaciones más frustrantes y angustiosas a las que me he enfrentado en estos cinco años de maternidad y mira que nos han pasado cosas… No me quiero imaginar el año que tuvisteis que pasar!
Un fuerte abrazo.
Hola Eva, lo primero mandarte un abrazo. Y decirte que, para mi, llevando la marcha que llevas…qué menos que te sientas así.
Yo te sigo desde el principio de tu blog, mis hijas tienen más o menos la edad de los tuyos, y no me parece que tu hagas nada mal, lo que me parece es que te han tocado dos maternidades muy difíciles. Ya el primero te requería mucho esfuerzo añadido por las dificultades que creías que tenía, el segundo te ha llegado con su alta demanda, llevas la tira sin dormir, tienes negoció propio en esañistán,… Hija, a mi me parece que madres entregadas como tu no habrá muchas, pero es que hay que reconocer lo que te ha tocado es un poco jodido y es normal que estés así, me parece a mi.
Yo creo que yo en tus circunstancias es posible que me encontraras en Siberia!! De hecho si te seduce el plan de Siberia, me llamas.
Yo me hincho a leer blogs de mormonas crafties y monas de lo más y sé que o todo es mentira, hay que recordar que muchas se ganan la vida con sus blogs. A mi me encanta leer esos blogs, pero son vidas photoshopeadas, no son de verdad, tienen más de empresa que de familia real. Seguro que además tienen unos hijos que duermen del tirón, cagan y comen bróculi que da gusto verlos.
A ellas les daba yo a mi pequeña o a uno de los tuyos…a ver entonces que blogs escribían, con sobrevivir van que se matan!
Alá, ya no te meto más rollo. Para mi lo haces de coña con el plan que tienes en casa. Si bien es posible que le des demasiadas vueltas al coco, pero imagino que no te cuento nada nuevo.
Yo en tu situación iría a ver a un loquero aunque fuera sólo a soltar lastre y a poner nombre a tus sentimientos, igual te ayudaba. También te digo que el día que empieces a dormir del tirón vas a flipar.
Lo del estreñimiento del pequeño y tu situación…te recomendaría que dejarás de leer a Laura guttman, no te conviene en estos momentos.
Muchos besos para ti. A mi me parece que lo haces muy bien. Ya quisieran muchos niños una mama tan entregada como tú.
Uy, a Laura Guttman no la he leído nunca porque ya lo me faltaba! jajaja No no no! jajaja
El plan de Siberia me seduce, además que me encanta el frío y la nieve, estaría en mi salsa 🙂
Yo estoy lejísimos de la perfección y tampoco aspiro a ella, la verdad, pero sí que creo que puedo ponerme la «medallita» de entregada / preocupada o como lo quieras llamar, porque más tiempo, más pasión, más ganas y más esfuerzo que le he puesto yo no se puede ya dedicar. Y odio el victimismo pero sí que creo que para las circunstancias que tenemos encima tampoco lo llevamos tan mal, francamente. Como se suele decir, al que juzgue mi camino le presto mis zapatos.
Muchas gracias por tu comentario Lorena, te mando un gran abrazo.
Ante todo decirte que creo que entiendo cómo te sientes porque también me siento así muchas veces, aunque mi posición suele ser justo la contraria a la tuya. Prefiero hablar, prefiero contar. No me importa que me juzguen, que me critiquen, exponerme. Para mi es mejor así. Que nadie piense que todo está bien, que soy la mejor madre, porque no es así. Somos personas, con todas nuestras debilidades y flaquezas. Nadie dijo que esto fuera fácil, nadie dijo que tuviéramos que poder con todo.
Quizás, sólo quizás, si dejas de esconderte en el armario y sacas a la luz todo lo que te atormenta te sientas mejor. Quizás, solo quizás puedas hacerlo en otro espacio que no sea este, desde el anonimato más profundo. Quizás sólo quizás eso te resulte liberador y quizás, sólo quizás deberáis acudir a un profesional que te ayude con ese bloqueo.
Un beso Mamá Contracorriente y mucha fuerza
Hola guapa, muchísimas gracias por dejarme tu comentario. Creo que compartimos muchas cosas, Mayor y tu hijo comparten muchas características, fíjate que incluso les veo parecido físico jajajajaa La otra noche leía tu relato de un día con él y me sentía muy identificada, bueno, yo con dos así a la vez y además peléandose entre ellos! En fin, que te agradezco mucho tu comentario, de verdad, y además te agradezco que escribas tu blog porque es de los poquitos que ahora mismo leo y es como un soplo de aire fresco, te lo aseguro. Besos.
Te leo hace 4 años y creo que eres una gran madre a la que la situación, que no la maternidad, te ha superado. Creo que un buen psicólogo te ayudaría a mejorar, a encontrar equilibrio, y si a tu marido tb le afecta, pues psicólogo para ambos, aunque esta solución es cara y sí uno de los problemas es económico…
Un besazooo
Hola María, muchas gracias por tu comentario. Hace unos meses intentamos contar con ese apoyo pero lo tuvimos que dejar aparcado por falta de tiempo, por falta de organización ya que no tenemos ningún apoyo con los niños o con la tienda y también, para qué negarlo, porque la carga económica era muy elevada y se hacía insostenible. Si me llevas leyendo este tiempo ya sabes que soy muy «pro-psicólogo» pero por desgracia la cosa no es tan fácil como decidir que vas a ir y listo, en nuestro día a día hay dificultades que hoy por hoy son insuperables y no queda otra que vivir con lo que tenemos.
Ante todo: Quien se ha atrevido a cuestionar tu labor de madre? Esa persona que te dejó ese comentario o bien no tiene hijos o son de catálogo, autoprogramables y con botón de off.Porque ser madre te da momentos maravilloso, pero también es lo más duro a lo que una mujer se puede enfrentar.Cualquier sufrimiento tuyo y de ellos, cualquier complicación, cualquier peculiaridad se vuelve un mundo. Yo he estado mil veces en ése armario y mil veces he salido y vuelto a entrar.Se lo que es tener un niño de alta demanda y que absolutamente todo gire entorno a el y sobre todo sé lo agotador que resulta.En cuánto al kakadrama nadie que haya
Pasado x eso entenderá jamás lo que conlleva y lo que supone.Así que metete en el armario, coge fuerzas, sal de el y grita una y mil veces que no eres dios sino una mujer.Que no fracasas como madre, solamente eres madre/humano/persona y quien se atreva a juzgarte que primero se de un paseo x su vida…
No te juzguez tú sólo tira hacia delante que vendrán tiempos mejores que te compensarán estos una y mil veces.
Mucho ánimo.
Muchísimas gracias por tu comentario Isa. Podríamos hablar largo y tendido de esa maternidad de catálogo, tengo muchas teorías al respecto jajajaja En cuanto a los niños de alta demanda, creo que la incomprensión es tremenda porque si no tienes uno no tienes ni idea de lo que estamos hablando y todas las decisiones que toma la familia para intentar hacer el día a día más fácil son interpretadas de manera negativa precisamente por no comprender qué es un niño de alta demanda y qué necesita. En fin, sí que llegarán tiempos mejores, de eso no me cabe duda, la cosa es cómo sobrevivir a estos que se han torcido tanto. Un besazo enorme.
Uff.. siento mucho que te encuentres así.
No estoy conforme con eso que dices que no eres la madre que ellos necesitan, creo que tienen.. LA MEJOR! y no somos perfectos!! todos tenemos un límite en nuestra paciencia, yo cuando ya no puedo más intento cambiar el chip radical, pero radical… Cuando estoy muy cansada intento buscar el último aliento para coger impulso y.. me levanto del sofá de un salto, intento jugar con él, y cuando veo la sonrisa ahí está la recompensa, no sé, intento dar la vuelta a la tortilla rápido, antes de meterme de lleno en la espiral de cansancio y mal humor.
Espero que sea una etapa que pase pronto, por lo que veo creo que aquí hay mucha gente que te apoya y que no estás sola, nadie te va a juzgar (no deberían!), pero desde aquí te doy muchos ánimos y un abrazo.
Guapa!
Jo Carmen, yo cuando estoy agotada el único impulso que cojo es para meterlos en la cama cuanto antes, de verdad que cuando mis pilas se agotan no doy para más. Y hay días que me acuesto y pienso que podría haber hecho más cosas, que «debería» haber hecho más esfuerzos, pero al mismo tiempo mi cuerpo me dice que no mueva ni un músculo más ¡qué complicado! Un abrazo de los fuertes.
¿Fracasada? pregunta a tus dos peques quien es la mejor madre del mundo, no creo que piensen lo mismo. Cuanto siento no poder ayudarte al igual que tú has hecho por mi con muchos de tus post, diciendo las verdades de la maternidad, las buenas, las regulares y las malas, por que de esas también hay, y son las que realmente más necesitamos compartir para no meternos en el armario creyendo que lo estamos haciendo mal y seguir adelante. Si necesitas meterte en el armario lo haces, pero 5 minutos solo eh? Lo justo para pensar un poco en todo lo bueno que has hecho.
Mucho ánimo y te deseo de corazón que superes estos baches.
Bea, dejando este comentario ya me ayudas más de lo que crees. Un besazo grande.
todo mi apoyo y solidaridad contigo. Ser madre no es facil, nadie te lo cuenta…nadie te lo dice…y todo el mundo te lo pinta de colores. Mi hijo tiene 2 años y dos meses, le amo con todo mi alma y mi corazon como tu a los tuyos….pero han sido los dos años mas duros de mi vida. Jamas habia sentido ansiedad, jamas. Y en estos dos años he tenido algunos episodios de verme realmente al limite. Yo, que queria ser madre por encima de todas las cosas. Te enfrentas cada dia y muchas veces sola ( sin comprension de apenas nadie y rodeada de gente que te dice que sus hijos comen, duermen y se portan fenomenal) a tu propio cansancio, sueño y dudas acumuladas. Y es duro, muy duro. Pero tu no eres una fracasada, ni yo tampoco. Eres una autentica campeona y una super madre…que tiene derecho a sentirse como tu te sientes, porque este camino no es un camino de rosas…y el cansancio diario, constante, el no dormir, el echar broncas, el tener dudas desgasta y desgasta mucho. Todo mi animo, un abrazo gigantesco y como tu, somo muchas 🙂
A veces quien más quieres es quien más daño te hace y es un sentimiento muy contradictorio, ¿verdad? Muchas gracias por dejarme tu apoyo, tienes el mío también. Un beso.
Mucho…super contradictorio…llegue a tu blog poniendo » dos años y sigue sin dormir » en google y apareciste tu…y m ayudo a llvarlo mejor y a no sntirme rara…eres una gran madre…s nota en cada una d tus palabras.un abrazo…
Eva, de verdad, siento leerte tan agobiada, pero al leerte yo misma me he reconocido en algunas líneas. He de decir que hay días en los que me acuesto pensando en que realmente esto está saliendo bien, que lo hago bien, que soy muy feliz siendo madre de dos tesoros increíbles. En cambio otros días lo hago hecha un mar de dudas, incertezas y miedos. Pienso quien me llamó a mí a meterme en semejante fregado y me asusto.
Este trabajo es el más difícil del mundo, todos lo saben, y sobrellevarlo cuando el resto de circunstancias no acompañan, pues es un reto tremendo. Sólo quiero que sepas que has hecho bien en empezar a contarlo y que aquí estamos todas para ayudarnos y comprendernos. Tú me ayudaste directamente aconsejándome en la compra de la Emeibaby, recuerdas? Y en muchas otras cosas indirectamente a través de tu blog. Así que te debo unas cuantas! Besos!
Eva, mucho ánimo, ya te han dicho todo… Mucho ánimo, x supuesto que eres la mejor madre del mundo. Es facil decir que pasara… Pero es la realidad, pasara… Se que lo superarás!
La realidad es que pasará, afortunadamente! Muchos besos.
Hola Arual, te agradezco mucho que te hayas pasado por aquí y me hayas dejado un comentario, eres de las poquitas «antiguas» que todavía están por aquí 🙂 Te mando un gran abrazo, pero grande grande, lo de «quien me mandó meterme a mi en ese fregado» lo pienso mucho últimamente, no te asustes que me consta que no se nos ha pasado solamente a ti y a mi por la cabeza. Más besos.
Mil abrazos para ti también! Te leo siempre aunque no tenga mucho tiempo para comentar. Claro que pasará todo pero a veces nos desbordamos, Es sano compartirlo! Y alentador también.
Muchísimo ánimos Eva! Yo me uno al grupo que se ha sentido durante muchos meses como una mierda, como una mala madre ( algunas personas se esfuerzan mucho en que te lo creas) y como una persona incompetente para hacer feliz a tu familia. Pero todo eso no es cierto. Ni para mi ni para ti. Eres lo mejor para tus hijos y sólo el hecho de ver la preocupación que tienes hacia ellos, te hace ser la mejor madre que podrían tener. Seguro que los tiempos mejores están cerca.
Un abrazo muy fuerte
Hola Laura, espero que estén cerca, sí! 🙂 Otro abrazo muy fuerte para ti, no dejes que esos esfuerzos ajenos te influyan, yo en eso ya me he hecho un master y no te cuento cómo me resbalan! jaja
Eva, conozco tu blog desde que empece a buscar mi embarazao, y gracias a ti descubrí este tipo de publicaciones, me has ayudado tanto! Con la lactancia, con la crianza, creo que gracias a ti he abierto más mi mente y por eso soy mejor madre. Sí eres capaz de conseguir ese efecto a través de las letras, no me cabe ninguna duda de que eres lo mejor que los tuyos pueden tener. En estos momentos en los que las responsabilidades te abruman, todo el apoyo de esta desconocida, muackkkkk.
Yanet, tus palabras me llegan muchísimo pero de verdad que creo que no merezco tanto, lo único que he hecho en este tiempo ha sido plasmar un poquito de mi tal cual lo siento y quizá a veces me he pasado de sincera, ¡a veces lo pienso! Te agradezco mucho que me hayas dejado aquí tu apoyo, un besazo.
Lo primero decirte que tienes que ignorar a los metemierda y personas tóxicas que aprovechan el anonimato para vomitar su veneno, pero eso estoy segura de que ya lo haces.
En lo demás te entiendo muy bien. Yo respecto a mis hijos directamente miento porque que no duerman bien con las edades que tienen genera miradas de suficiencia y reproches que no estoy dispuesta a seguir aguantando.
No tengo que justificar mi maternidad, ni no ser perfecta, ni que mi mayor le tenga manía a tantos alimentos, ni las rabietas…
En mi casa todo es perfecto y punto porque estoy harta de que la gente pregunte sin querer oír la respuesta, sólo para explicarte lo bien que les va a ellos y lo mal que lo estás haciendo tú.
No sé si estoy dentro del armario como tú dices, sólo tengo unas pocas cosas claras: adoro a mis hijos y no espero que sean perfectos, yo no soy perfecta, mi casa está desastrosa la mayor parte del tiempo (eso me generaba mucho estrés, ya no, mi nivel de exigencia está bajo mínimos), no estoy dispuesta a pasarme el día diciendo «no» así que sólo lo digo en caso de catástrofe inminente, si el precio por tomarme un café tranquila en la cocina es encontrarme el salón empapelado con papel higiénico es un buen precio….
Cualquiera diría que soy una madre desastrosa, no, sólo sobrevivo lo más felizmente que puedo y procuro huir de la gente dañina. Mi casa, mis reglas, mis prioridades.
Raquel, me ha llegado mucho tu comentario y no sabes cuánto te lo agradezco. Un fuerte abrazo.
Lo primero de todo es desearte «mucho ánimo y paciencia» para tu día a día que, aunque parece muy bonito decirlo, al final es lo que nos queda.
Solo decirte que de cara a la galería todo son sonrisas, felicidad,.. ya me entiendes, pero de puertas para dentro otro gallo canta… Así que piensa que no eres la única por sentirte así y desde mi humilde opinión es bueno expresar tus sentimientos, pero para todo.
Ánimo y mucha fuerzza
Te entiendo guapa, así es 🙂 Muchas gracias por tomarte un ratito para mandar esas fuerzas. Besos.
Hola Eva,
Es la primera vez que escribo en tu blog (y la primera vez que escribo en un blog que no sea en el blog de una de mis primas pequeñas, donde lo hago por amor a ella). Estoy embarazada de 34 semanas y éste va a ser mi primer bebé. Además, nunca he sido muy maternal, ni tampoco he hecho mucho caso a las mamás que hay a mi alrededor, por lo que el embarazo está resultando ser una fuente de sorpresas (buenas y regulares).
No sé qué tal mamá seré cuando llegue el momento, pero te aseguro que si logro la mitad de lo que tu has conseguido me daré por satisfecha. Sinceramente, admiro tu dedicación a tus hijos y tu dedicación a este blog, tu capacidad emprendedora etc. Durante estos meses, en los que he tenido miles de dudas y miedos (a pesar de tener un embarazo estupendo y de estar encantada con mi futuro bebé) este blog me ha ayudado como ningún otro, por tus recomendaciones, por tu sinceridad y por tu forma de afrontar la maternidad. Nada de lo que he buscado por internet, ni mis charlas con el ginecólogo, ni las famosas clases de maternidad, me ha resultado tan útil. Tu entrada de hoy me da pena, pero quiero animarte a que sigas adelante y de verdad, no cambies. Es un tópico y ya sé que lo digo desde mi inexperiencia total y absoluta en estos temas, pero estoy segura de que al final del túnel hay luz, que en la vida hay cosas malas, pero que hay que aferrarse a lo positivo, a lo bueno, disfrutarlo e intentar relativizar los problemas. Si lo piensas en frío, todo tiene una solución (a veces no tan buena como nos gustaría) pero solución al fin y al cabo…
Mucho ánimo y muchísima fuerza para ti y para tu familia. Tu post de hoy sólo ha demostrado que eres una persona y mamá de carne y hueso.
Un fuerte abrazo y gracias, de verdad, por contarnos como te sientes.
Hola María, muchas gracias por animarte a dejar tu primer comentario, espero que sea el primero de muchos 🙂 Y enhorabuena por tu embarazo.
Espero que mi post no te haya asustado; la maternidad, aún con sus momentos malos o muy malos, es algo increíble y fascinante, ya lo verás! Y tu vivirás tu propia experiencia, que será absolutamente única y especial para vosotros. De corazón te deseo que te resulte sencillo dentro de la complejidad que la maternidad tiene.
Cualquier cosa que necesites, aquí estaré 🙂
Un abrazo y gracias a ti por tu cariño.
Que complicado es esto, quiza deberias salir d ese armario y pedir ayuda a gente q realmente te pueda entender, a quien no t cuestione, con kien tengas confianza.
No tengas miedo, no t culpes, eres humana.
Mucho animo y deseo q pronto te sientas mejor, mucho mejor!!
Siempre leo tu blog, pero poco o nada comento, porque lo leo en netvibes y voy siempre deprisa.
Qué decir que no te hayan dicho ya: mucho ánimo y mucha fuerza. Todo pasa.
Lali
Me he emocionado con esta entrada. Este es un sentimiento que creo que hemos vivido muchas madres y pocas sacamos a la luz. Te hacen creer que la maternidad es perfecta y cuando chocas con la realidad y sientes estas cosas parece que seas la peor madre del mundo, pero nada más lejos de la realidad… todas de una manera u otra lo hemos vivido. Te admiro mucho.
Te envío un fuerte abrazo y espero que no te culpes ni te castigues demasiado. La maternidad es difícil muchas veces
A palabras necias, oídos sordos. No dejes que ese tipo de comentarios, echos con mala baba y sin el menor respeto a la verdad, te afecten. Sé que es difícil, sobre todo en esos días que miras alrededor y parece que nada sale bien, que tus decisiones no han sido las correctas, cuando tú misma te cuestionas y te pueden el cansancio, la inseguridad, la angustia… Hasta tal punto que sientes que todo lo haces más.
No me voy a tirar el pisto, yo soy una madre feliz y afortunada y comparto (o más bien, compartía) actividades, reflexiones, consejos y algún que otro cabreo. Quizá no tanto las sombras, porque no es eso lo que quiero recordar el día de mañana. No quiero ser esa mamá que se queja de sus hijos, porque, además, enseguida alguien te señala como si no los quisieras suficiente.
Pero la maternidad está llena de sombras, de noches sin dormir, de preocupaciones, de gritos, de frustración y de lágrimas. Y todo ese dolor es parte de ser madre y de querer a nuestros hijos, sumado a nuestra humilde condición de seres humanos. Ser madre no te convierte en una supermujer, sólo en una mujer con hijos. En la mayor parte de los casos, me atrevería a decir que mejoramos como personas, por la necesidad de empezar a ver el mundo a través de los ojos de otro, dotándonos de una empatía que a veces somos capaces de transladar a otras personas. Pero ya está.
Ten cuidado con el armario, porque es estrecho, oscuro y huele a cerrado. A veces hay que dejar cosas dentro, pero hay que tener cuidado y asegurarse de airearlas de vez en cuando para que no amarilleen y se apolillen.
Muchas mamis te lo han dicho y sólo lo puedo repetir: Busca otras madres. Ni siquiera hace falta que estén en una situación exactamente igual a la tuya, aunque igual no podrán entenderte completamente si no saben lo que es tener un bebé de alta demanda. Pero, si son capaces de empatizar y escucharte sin juzgarte, sólo dejándote desahogar ese dolor y acompañandote, notarás que te ayuda.
Y, si ves que la espiral es insuperable y que no sabes cómo continuar, no tengas miedo, ni vergüenza (y digo esto porque es otro maldito tabú de nuestra sociedad) y busca ayuda profesional. Si hay algo que ni tú ni tu familia os merecéis es que caigas en una depresión.
Mucho ánimo. Y, si no tienes con quiem desahogarte, entra en mi blog y contáctame por email. Quizá no pueda hacer mucho más, pero puedo escucharte y estar ahí.
Unabrazo muy fuerte.
Te leo desde hace tiempo, pero hace mucho que no comentaba. Hoy tengo que hacerlo, porque no me gusta ver a una madre así.
No hay maternidades perfectas, incluso las que lo parecen, no lo son. La vida no es un anuncio de la tele, pero lo contrario no vende, qué le vamos a hacer.
Yo tengo 4 hijos (12, 10, 7 y 3) y, puedes llamarme loca, no me importaría un quint@, no hemos colechado y he amamantado lo justo (con el primero lo dejé a la primera de cambio y, por circunstancias, con la cuarta ni lo intenté), ha sido mi elección y no por eso los quiero menos. Duermen muy bien, comen de todo y a grandes rasgos se portan bien. Trabajo fuera de casa y me intento adecentar cada día para ir al curro (sin tacones, que para mi son incompatibles con la renfe), estoy en la puerta del cole todas las tardes para llevarles a la piscina, el primero y el tercero natación y el segundo waterpolo, así que aparentemente todo es perfecto.
Pues no lo es.
Lo que pasa en casa, se queda en casa. Discuten y se pelean entre ellos, la cuarta es una caprichosa de tomo y lomo, lo de los deberes es caso aparte, yo estoy cansada, no tengo un momento ni para contestar un whatsapp a tiempo, me pasó la tarde gritando, con mi madre acabo discutiendo siempre porque no entiende mi forma de criarlos (prefiero a mi suegra que, aunque es muy absorbente, no se mete en nada), con padre apenas cuento, por su trabajo, si está en casa, los lleva al cole y para de contar, pero está muchas temporadas fuera, así que queda todo para mi y a veces me veo superada, y lo pago con ellos (y luego me arrepiento no sabes cuanto…!!!), al final les acabo regañando por cualquier cosa, ya sin razón, y estoy de mala leche hasta que me meto en la cama.
Y llegados a este punto, es donde entran en juego mis amigas, también madres, que saben de qué estás hablando porque a ellas les pasa lo mismo, porque no hay maternidad perfecta, o bueno, todas lo son dentro de su imperfección.
Sal de ese armario, tampoco pasa nada si tienes que pedir ayuda para hacerlo, pero debes hacerlo por tus hijos, porque para ellos eres su mamá y no hay otra mejor, y porque todo ese caos en el que estas metida pasará y no es justo que te pierdas ese momento!! Tenemos que aprovechar cada segundo, porque es irrepetible y porque lo que hoy nos parece el fin del mundo, no será nada comparado con otros momentos que nos tocará lidiar, (te lo dice una que está apuntito de entrar en la preadolescencia, eso si que da miedo….!!!)
No me conoces de nada, pero si en algo puedo ayudarte, tienes mi correo.
Ánimo, que tu puedes!!
Hola, te agradezco mucho tu comentario. La verdad que no me pareces para nada una loca, debo decir que yo en algunos momentos me planteo un tercero aunque automáticamente se me pongan los pelos como escarpias 🙂 Un abrazo.
Ya muchas te han dado ánimos , poco me queda por decirte, salvo que mi bebé tiene dos meses y ahora se lo que es la alta demanda : no poder seguir con tu rutina, proyectos, vida , para dedicar todo al nuevo amor de tu vida. Y lo haces con ganas y cariño, pero de vez en cuando miras atrás y ves alejarse tu vida pasada. Solo queda mirar hacia adelante lo más que podamos y hacernos fuertes, autocompadecernos cuando podamos en nuestro armario(como bien dices) y comenzar aceptar la nueva vida… Qué fácil se dice, eh’? jajaja.
Un besazo a ti y a tu preciosa familia.
Te sigo en twitter!
Hola oh mercy! Tu todavía puedes tener toda la esperanza del mundo. Dos meses es poquito tiempo, aún es pequeñito, es normal estar así. Ya verás como las cosas mejoran, ¡no vas a tener la misma suerte que yo! Lo que se hace realmente duro es seguir teniendo un día a día tan absorbente como el que se tiene con un recién nacido y sin que tu bebé lo sea.
La soledad del armario y su realidad inherente…aunque no soy madre te entiendo…sin embargo al final esto, tambien pasará, ojalá sea pronto
besos
Sra.S
Besos!
Querida Eva, hace mil años que cerré mi blog y no suelo comentar, pero te he leído tan sola y tan triste en esta entrada que no podía dejar de hacerlo.
Tu forma de crianza y la mía difieren bastante en muchos aspectos, pero ante todo quiero darte mi apoyo.
Lo primero es decirte que eres la mejor madre para tus hijos y que alucino con la capacidad de sacrificio que muestras con los dos, con temas como el pecho, el colecho, etc.
Lo segundo es decirte que puedo imaginar ligeramente por dónde van los tiros, y que el tiempo, siempre el tiempo, lo cura (o mejor, lo minimiza) todo.
Mi primera hija no fue de alta demanda, pero su hermano es mucho más demandante que ella, y aunque duermen ambos muy bien (algo que considero fundamental para que una madre directamente no enloquezca), comen fatal. Que es otra lucha, eh?
El niño grita en cuanto no estás a medio metro de él, quiere que estés cerca todo el tiempo, sólo se duerme si le das la mano, odia el colecho, por lo que cuando se despierta la única forma de tranquilizarle es meter la mano a través de los barrotes de la cuna… Y todo esto con una hermana de 5 años a la que siento que abandono de vez en cuando porque es él quien reclama más atención.
Desde que el niño nació no tengo tiempo de nada, hay días que ni me peino. De maquillarme me he olvidado, el estrés me ha hecho perder 28 kilos en 9 meses y me paso el día corriendo de un lado a otro.
Así que no me imagino lo que debe ser atender a dos niños de alta demanda y tan seguidos de edad, cuando además, tienes una falta de sueño que acabaría con la paciencia de cualquiera.
Si a eso le sumas los problemas adicionales que puedo imaginarme… demasiado haces. Demasiado.
Aprende a ser un poco más indulgente contigo misma. Pasa de la gente tóxica que malmeta sin ánimos de ayudar. Y sé amable contigo.
Pasará, Eva. Pasará.
Un abrazo grande.
Hola guapa, es una pena que cerraras tu blog, mil veces he pensado en ti y en cómo estarías. Una vez no recuerdo cómo supe que por fin tenías a tu niño y me alegre muchísimo por ti.
Entiendo bien lo que cuentas, qué te voy a decir yo… El desatender al mayor es algo súper duro, te puedo contar mil anécdotas.
Sobre la diferencia de edad yo te puedo decir que nosotros no se la recomendamos a nadie. Se llevan 30 meses y cuando alguien nos pregunta por la calle, que a veces nos pasa, o te enteras de una pareja que van a tener a su segundo hijo con esa distancia, no sabemos ni qué decir sin que se nos note porque para nosotros es una diferencia absolutamente demoledora. Bueno, siendo sinceros es que la experiencia está siendo tan brutal que cuando parejas cercanas nos comentan su segundo embarazo nos cuesta disimular que por dentro pensamos «madre mía, no sabes la que te espera» jajajaja
En fin, yo sé qué pasará, pero es que conformarse en que pasará me parece muy triste.
Muchas gracias por pasar por aquí. Un abrazo grande grande.
No puedo evitar intervenir de nuevo, espero no resultar pesada… Por una parte, creo que has dado en el clavo, y es que aunque sabemos que pasará, conformarse con eso a mí también me parece muy triste. Y por eso aunque desahogarse esté bien (a veces, y si encuentras con quien, porque el niño va creciendo y de pronto ya no es un bebé y es tu culpa que no le has enseñado…) yo también procuro buscar posibles soluciones.
La mía, y ha sido cuando el niño iba a cumplir 32 meses, ha sido pasarnos a su habitación, de manera que él duerme abajo en su cama nido y yo arriba, y cuando quiere pecho sube, pero parece que al no «olerme» duerme más horas seguidas sin pedir teta cada rato. Y lo sorprendente para mí fue que el día que se lo propuse, diciéndole que dentro de un tiempo, me dijo que ya, que hoy sí quería ya dormir en su cama. Y se sigue despertando, hoy a las cinco de la mañana la primera vez, días atrás a las tres de la mañana, pero yo duermo mejor. Y digo yo, porque estoy segura de que los niños, no por despertarse mucho descansan peor, sino igual y además se sienten más seguros, y al día siguiente están felices y descansados igual que el resto. Y para las que comentan que hay que enseñarles a dormir, y que tienen que aprender, a mí que me expliquen la fórmula mágica, porque os aseguro que yo no soy quien despierta al niño, y cuando dormíamos juntos a veces le amamantaba sin enterarme apenas, y si el método que proponen es dejarle llorar… lo siento pero no es para mí, soy su madre día y noche, aparte de que me parece un horror teniendo en cuenta que vivo en un piso y no en un chalet aislado.
Por otra parte, tocas el tema de lo duro que es desatender al mayor para atender al pequeño. Ufff… creo que a mí la vida me ha dado un niño de alta demanda para que no tenga demasiada pena por no tener un segundo. Porque cuando compré mi piso, con dos habitaciones, pensaba que algún día tendría que cambiar de casa pues ¿cómo iba a tener un solo hijo? Ahora, y después de mi experiencia (unido a circunstancias económicas y laborales, también, si me tocara la lotería habría que replanteárselo todo, claro, jejeje), empiezo a buscar las ventajas de ser hijo único… En todo caso, y desde mi propia situación, ver a niños que apenas empiezan a caminar con sus madres barrigonas me dan tanta pena… Pero claro, si ayer mismo mientras me duchaba tuve que oír a mi hijo gritando «ama veeeeen» (con su padre intentando consolarle, inútilmente)…
Me parecéis unas valientes las que tenéis dos hijos tan seguidos, y de verdad que os admiro, y por eso Eva creo que lo estás haciendo tan bien, porque eres generosa y piensas en tus hijos y sus necesidades cuando muchas creen que eso no es prioritario, y por eso no debes olvidar que aunque haya días en los que estemos sobrepasadas, siempre seremos su mamá, con todo lo que eso significa.
Hola Laura, no es valentia, ¡es inconsciencia! jajaja Yo siempre digo que si pudiera volver atrás no repetiría la diferencia de edad que se llevan mis hijos porque para nosotros ha sido bestial. Aunque realmente nunca se saben cómo hubieran sido las cosas si hubiéramos tomado otras decisiones, yo creo que mi hijo Mayor ahora mismo encajaría muchiiiiiiiisimo mejor tener un bebé. Pero lo hecho, hecho está. Y hay que afrontarlo de la mejor manera posible.
Besos!
Hola Eva. Hace mucho tiempo que te sigo y nunca había comentados tus posts pero esta vez, me apetecía hacerlo.
Antes que nada, te diré que trabajo, que tengo 42 años y dos hijos (un niño de tres años y una semama, y una niña de 16 meses). Que soy la mayor de 7 hermanos, y mi madre, la mayor de 6. Y que tanto mi madre como mi abuela, son mis modelos a la hora de criar y educar a mis hijos.
Llevo casada con mi marido 15 años, somos una pareja feliz. Al principio de nuestro matrimonio, él no quería tener hijos y a mi tampoco me apetecía mucho… hasta que pasaron los años y empecé a tener una edad (39) en la que debíamos pensar si los teníamos ya o definitivamente nos olvidábamos de ellos. Y así, tomamos la decisión de ir a por un bebé… Y la experiencia resultó de lo más MARAVILLOSA: el embarazo, el parto y la crianza de mi hijo fue lo mejor. Y después de nacer mi Mayor, fuimos a por mi Pequeña.
Tener a nuestros dos hijos nos ha hecho tremendamente felices… y en algún momento nos hemos planteado tener un tercero… pero definitivamente, lo descartamos porque estamos fenomenal los cuatro juntos.
Mi manera de criar a mis hijos no tiene nada que ver con la tuya. Creo que es un error el colecho porque yo, entre otras cosas, debo enseñar a mis hijos a dormir, y cada uno duerme en su cama, por la noche. También considero otro error el porteo como “forma de relación” con un hijo; yo he tenido mochila y la he utilizado para sacarlos a la calle, y es verdad que sentirlos junto a ti es una sensación inigualable, pero como madre, es mi obligación enseñar a los niños a entretenerse y a jugar solos. Lo que sí me ha resultado de gran ayuda es tener un parque o corralito en casa; los he acostumbrado desde pequeñitos y allí, mis hijos han jugado, han dormido, han visto la tele, han hecho construcciones, etc; han aprendido a estar solos, porque a eso, también se aprende.
Otro de los puntales en tu modo de crianza es la lactancia materna. Yo, hace ya muchos años, tuve muchas mastitis (infección en los conductos mamarios), bilaterales (en los dos pechos de manera simultánea). Los antibióticos no me hacían efecto, eran continuas, y lo pasaba fatal. Hasta que, en una de ellas, me tuvieron que operar de urgencias para quitar la infección. Fue entonces cuando me dijeron que si un día tenía hijos, era mejor la lactancia artificial. Después de la operación, seguí teniendo más mastitis, hasta que un día, desaparecieron… y no volví a saber de ellas, hasta hoy. Por ese motivo, he criado a mis hijos con biberón. Mi Mayor comió mal cuando fue bebé, pero ahora, come de todo y en cantidad. Mi pequeña, desde que tiene tres meses, hace cuatro comidas al día. Y es que, a los hijos, dentro del montón de cosas que debemos enseñarles, también está el de alimentarse correctamente (y por la noche, no se come). Por supuesto que considero que la lactancia materna es maravillosa y sé que las madres sienten gran satisfacción cuando les dan el pecho a sus bebés, pero también sé que hay muchos niños que lo han pasado muy mal porque los pediatras/comadronas/madres/etc. se han empeñado en no reforzar la lactancia materna con biberones, provocando hambre en los pequeños, lloros, pérdidas de peso, etc.
A pesar de todo lo que te cuento, me encanta tu blog, como escribes y creo que eres una madre de primera! Te mando mi ánimo porque estoy segura de que poco a poco, las cosas se irán poniendo en su sitio.
También te quería decir una última cosa: intento educar a mis hijos pensando en el mañana, en hacerles adultos responsables, sensibles pero fuertes. Todo el mundo dice que cuando crecen los niños, crecen los problemas. E intento entrenarles en la frustración: porque no se puede tener todo lo que se desea, ni con la rapidez que uno quisiera… Nuestros hijos, son tremendamente afortunados de vivir en una sociedad que les protege, donde son alimentados adecuadamente, que vela por su salud. Mis hijos no son distintos de los niños que nacen en África, donde la vida no vale nada, sin alimentos ni medicinas. Por eso, nuestros hijos son tremendamente afortunados y por eso, deben estarles a la vida, eternamente agradecidos.
Te deseo lo mejor. A ti y a todas las chicas que optáis por una maternidad distinta a la mía.
Hola Ana, muchas gracias por tu comentario. Creo que aunque criemos de manera diferente al final la mayoría de los padres compartimos unas dificultades y retos más o menos similares y eso es lo que nos une. Te agradezco tus buenos deseos.
No obstante, tengo que discrepar en un punto importante y que precisamente es el centro de la incomprensión de los papás de niños de alta demanda: no somos idiotas, ni masoquistas, ni unos inútiles o unos dejamos. No es que no hayamos «educado» a nuestros hijos para dormir «bien», comer «bien» o entretenerse solitos porque seamos unos vagos, unos flojos, unos padres excesivamente permisivos o con unas creencias equivocadas. No es que nos «merezcamos» tener un día a día duro por no «haber hecho las cosas bien». No es que unos padres tengáis la receta de unos niños encantadores y otros no hayamos dado pie con bola en nuestras decisiones.
Simplemente es que los niños no son todos iguales, en absoluto, y quien tenga niños de alta demanda sabe que lo que estoy diciendo es así. Igual que hay niños-seta, que yo los he visto con mis propios ojos, hay niños de alta demanda y comparar el día a día de una familia con niños de alta demanda con una familia de niños normalitos (ya no digamos de niños-seta) es como comparar una pera y una manzana. Créeme, yo no disfruto con ciertas cosas que ocurren en nuestro día a día, a mi me encantaría que mis hijos se entretuvieran solitos, por ponerte un ejemplo, yo también me compré un parque infantil y te aseguro que no acabó muerto de la risa por falta de haberlo intentado. Puedo cometer mil errores en mi día a día pero no me considero una idiota.
No sé si me explico porque hoy estoy especialmente espesa, lo que quiero decir que es que, con independencia de mi estilo de crianza, mis hijos son como son y tengo que aceptarlo, y todos aquellos que creen que lo que tenemos es fruto de ser unos padres-lerdos les prestaba yo nuestro día a día una semanita, que ya vendrían después pidiendo disculpas.
Eva, nunca, jamás, pienso de ninguna madre que sea lerda o idiota. No me gusta faltarle el respeto a la gente y creo que cada uno, tiene sus ideas, aunque no coincidan con las mías.
Espero no haber dado la sensación de que piendo que haces «mal las cosas». No juzgo. Solamente, hay puntos diferentes de vista.
Y por supuesto, los niños no son iguales. Los míos, en absoluto son «seta» porque, sobre todo mi Mayor, ha sido movidísimo (empezó a correr con diez meses y ahora parece que está un poco más tranquilo). Y claro que hay niños que dan más la lata que otros… pero esto es una carrera de fondo y no importa como se empieza sino como se acaba.
Te reitero mis buenos deseos para ti y para todas las madres.
Un saludo
Hola de nuevo. Sí, te he entendido, no te preocupes, tu comentario me ha parecido respetuoso y entiendo lo que quieres decir. Simplemente quería explicarlo porque al final cuando hablamos de estos temas sé que hay muchos papis que piensan como tu y nosotros creemos que simplemente no vivimos la misma realidad. Un abrazo.
es que te entiendo tan bien eva…mi hijo ni de recien nacido fue el tipico niño que come y duerme. El se podia pasar horas despierto, cuando paseabamos en cuanto paraba el carrito se quejaba…jamas hemos podido tomar un cafe tranquilos en un bar porque desde que el era un renacuajilo de dias o pocos meses habia que entretenerle continuamente…y sin embargo veo niños en el parque o en cafeterias con sus madres teniendo conversaciones animadisimas de media hora o una hora mientras el niño esta tan pancho mordiendo su mordedor o mirando a las musarañas!! es obvio que cada niño es un mundo. Unos dormiran de uno tiron con tres meses ( lo cual me parece una utopia dada mi vivencia) y otros tenemos que hacer el pino puente para que se duerman porque cada niño sencillamente es diferente y nada tiene que ver con si colechas o das lactancia materna…hay niños muy muy demandantes y niños seta ( me ha hecho mucha gracia ;)) . Si hubiera tenido uno de esos hasta me plantearia ir a por el segundo. Pero despues de 26 meses de no dormir ni una sola noche entera, de no poder tomar un cafe tranquila, de si salimos a comer tiene que ser con el dormido o nos pasamos la comida entreniendole y no comemos y ya ni hablamos de dejarselo una noche a los yayos…. porque el de noche quiere a su mami y a su papi…tener un segundo me hace tener escalofrios.
Muchos besos de nuevo super mami! un dia hasta echaremos de menos las noches en vela…se hacen mayor muy pronto y da penita, a que si?
Tu me entiendes a mi y yo a ti jajaja Un abrazo! 🙂
Que bien Ana, de verdad que me alegro de que existan maternidades así, que todo te haya resultado maravilloso y estupendo… pero de verdad que no es el caso de todas las madres. Hay muchas que lo pasamos muy, muy, muy mal y las cosas no se resuelven de un día para el otro… de verdad que ya nos gustaría ir al médico y que nos dieran una pastillita o una receta para que todo encaje y funcione pero los tratamientos, los cambios, las adaptaciones llevan tiempo. Yo he pasado por todos… clínicos, psicologos, psiquiatras, neurólogos… según lo que dices, el problema es mío, es mi forma de encarar la maternidad, por haber colechado, por darle el pecho mas allá de los 5 meses, por no tener la estabilidad mental necesaria. Mi niña no durmió del tirón hasta pasado el año y medio y te juro que no iba yo a despertarla ni sacudirla por la noche, ella se despertaba solita, a día de hoy duermo unas 4 horas… y van 2 años. Me alegro de que tus niños coman, duerman, se porten bien, se adapten a todo, tu marido te ayude, te apoye, te comprenda y tu entorno familiar te de mucho apoyo… creéme, no siempre es así y la salud de las madres se reciente… las generalizaciones en la maternidad no funcionan, a mí me dieron miles de consejos y aqui estoy dos años despues, todavía intentando buscarle la vuelta… Y NO ES MI CULPA NI HE HECHO NADA MAL… SIMPLEMENTE A VECES LAS COSAS SE COMPLICAN Y LA REALIDAD TE SUPERA… a tí no, pero a muchas mujeres sí…
Hola Eva,
Las mujeres, que nos autoexigimos demasiado!!!! No me metas miedo que por fiiiin he conseguido que un embarazo me pase de las 12 semanas!! Somos tan tontas que yo me siento una mierda por tener un embarazo tan malo y tener que hacer «trampas a la naturaleza» tomando tantas medicinas!! Dime tu si un hombre pensaría eso.
Relax, que has conseguido muchas cosas!! Y bueno, te han tocado niños de alta demanda, igual que a mi me tocaron los abortos y los malos embarazos, pero con estos bueyes hemos de arar…. La felicidad viene de la aceptación!
Yo pensaba que ibas a hablar de la epidemia de ebola, porque me acuerdo de cuando te tocó a ti la epidemia de gripe A estando embarazada… ¿como lo vivirías hoy en día? Dame ideas para que no me emparanoie, por favor!!
Todo pasa!! Llegarán tiempos mejores, seguro
Un beso!
Hola Laura, para mi lo de las enfermedades y embarazo/recién nacidos es pánico total. Esto del ébola… quiero pensar que es poco contagioso, fíjate que parece que ni el marido se ha contagiado. Vivir con miedo es horrible pero yo al menos no sé dominarlo. Fíjate que aunque tengo muchos motivos para no tener un tercer hijo, uno de los que más me echan para atrás es pensar en pasar un embarazo con dos niños escolarizados en casa y todos los virus que pueden traer.
Te deseo que vaya todo fenomenal. Un abrazo grande.
Imagino que desahogarte ayuda pero que lo que realmente necesitarías es que cambiase tu situación. Ya que esto no es posible podrías intentar cambiar el ángulo de pensamiento y tomarte las cosas de otra manera, como personas tendentes a preocuparnos por todo y pesimistas entrar en ese círculo es lo más fácil del mundo. Es duro cambiar ciertos hábitos pero de verdad, que todo en esta vida es cómo lo afrontes, aunque el cansancio también juegue en tu contra. Tus hijos estarán bien, y esto es un dibujo a gran escala, no te preocupes tanto y no intentes controlarlo todo.
Y búscate algo en lo que evadir la mente. Muchísimo ánimo
¡Por eso me doy al punto! jajaja Besos.
Acabo de llegar hace media hora a tu Blog y me he encontrado estos berenjenales… No te conozco, no he leído nada sobre ti, sólo este post, no conozco nada de tus peques. Y me atrevo a opinar. Disculpas de antemano.
Tengo dos hijos, de 6 y 2 años y cinco meses. Pasé seis meses de pura desesperación porque no descansaban ellos ni yo. Les dejé siempre venirse a nuestra cama cuando lo necesitaban. Hasta que me planté. Contra mis principios, les dije que a su cama, que no podía más. Si están enfermos, sí, pero si no, sintiéndolo mucho… cada mochuelo a su olivo. Funcionó bastante (no del todo, eh!), pero son mayores y pueden aprender a enfrentarse a sus miedos (que no son tales, si es q no tienen miedo, me lo han dicho!). Pasar de dormir dos, tres horas a dormir cinco es para mí ahora mismo un lujo que me permite mantener la calma más tiempo.
A las comidas: siempre han comido bien, pero me montaban unas juergas… Si uno pegaba un grito en cero coma estaban a grito pelado. Y yo con ellos, claro. Cambió (bastante, pero no del todo) en el momento en el que le dije a mi marido que si dos colaboraban al«reñir», no había una que era la ogra oficial de la familia. A los niños les distribuí tareas adecuadas a su edad que pueden hacer y sentirse mayores y tomados en serio y no como bebés.
Pelearse: todavía estoy en ello. Me saca de mis casillas. Aún no tengo estrategia, a ver qué se me ocurre.
Qué quiero decir con todo esto: que la mayoría de los padres improvisamos, no actuamos sino que reaccionamos a lo que va surgiendo sin un plan premeditado.
Estuve tan mal que estuve a punto de separarme y mandar todo a paseo. Y la verdad es que me extraña porque con el mayor fue todo como la seda, bueno, bastante mejor que ahora (el tema sueño era también de pesadilla). Pero es que los dos juntos… Uffff. Me apunté a un curso de zumba para salir de casa y mover mi frustración. Me encanta y no lo pienso dejar. Me ha ayudado (aunque es un factor de estrés pensar que otra semana más tendré que ir a zumba sin depilar por no haber tenido tiempo). He contratado a una señora que me hace la limpieza una vez a la semana porque era un factor que agravó la situación muchísimo. Es decir, estoy intentando buscar soluciones caseras para volver a la normalidad, para que mi vida sea llevadera. Cuanto menos estrés tenga yo, menos estrés tendrán ellos y podremos hacer cosas juntos. Cosas bonitas juntos. Me costó darme cuenta, pero voy saliendo del pozo. Y digo pozo porque no veía solución, ni saluda, me veía atrapada y cada vez se agravaba.
Por favor, con toda seguridad (porque no conozco tu blog) eres una madre estupenda pero humana!!! Busca soluciones humanas, que a veces son las más sencillas pero no las vemos. (Si te pongo un ejemplo de lo más gilipollas: las broncas que yo tuve con mi marido porque dejaba el lavabo del cuarto de baño siempre hecho un estropicio, salpicaba todo, hasta los niños se quejaban! Lo solucione dejandole un paño dentro de un recipiente para que lo pasara al terminar. Queda horroroso, sí, y no se acuerda siempre, pero hemos reducido el nivel de broncas. Así con muchas cosas con los nenes también.)
Dios me libre darte lecciones ni consejos. Te mando muchos ánimos, así, sin conocerte, porque me has llegado al alma. No te rindas, has tocado fondo y es el momento de subir! Besos
Muchas gracias por dejarme un comentario tan extenso y lleno de humanidad. Un abrazo!
Eh! Por favor, animos… Has hecho muy bien en desahogarte asi… Eres fantastica y solo hace falta leerte un poco para darse cuenta… Ademas es evidente también que eres especialmente inteligente… Eso es muy bueno pero puede hacer que todo sea mas duro, pero animo, sigue aspirando a Lo que Crees que merece la Pena de verdad porque tienes razon .
Y nunca choveu que non escampase, te Lo digo por «dura» experiencia… Mi niño tiene 4 y medio y aun es duro, pero infinitamente mejor… De estar hecha polvo pensando que era un desastre he pasado a estar cada vez mas orgullosa de nuestra manera de superar todo. Y es que no dormir literalmente durante casi 4 años nos ha llevado a volvernos medio locos, a casi una ruptura familiar..lo nuestro era como la tortura esa de Guantánamo, que te dejan iniciar el sueño para despertarte cada hora sin descanso… Ahora nos despertamos varias veces pero es posible dormir 5 horas de un tirón!! Y los amigos, las madres, hermanas mayores con tres hijos, cuñadas y suegras poniéndote verde…. Nos ha salvado la unidad de los dos padre y madre, la confianza en nosotros mismos (que nunca llego a ser destruida), la inteligencia, el sentido común y, sobre todo, el amor a nuestro hijo. Nos ha pasado eso de que renunciamos al segundo porque no nos veíamos con fuerzas ni físicas ni psíquicas para afrontarlo…. Y hay que sobrevivir…. Somos supervivientes y tu también lo serás… Y aún hoy encuentro muy difícil poder lavarme el pelo, imposible leer un libro (pero volveré a hacerlo) yo pase dos oposiciones del Estado de las más duras y sufrí mucho y aprendí a luchar minuto a minuto para conseguir algo años más tarde… Creo que eso me ha ayudado mucho a saber resistir… Eso me permite también tener una profesión en la que puedo pedir excedencia y jornada reducida y volver al trabajo sin que nadie me diga nada, y mantenerme así en un puesto relativamente alto y bien considerado…. Si no, a estas alturas estaría sin trabajo, el sector privado no respeta los derechos de maternidad y conciliación, digan lo que digan. Pero mi hijo nos adora, es brillante, inteligente, cariñoso, exigente, hiperdemandante… Y nosotros adoramos a nuestro hijo y seguimos haciendo lo que nuestro sentido común y nuestra intuición nos dicen que es lo mejor para el y para nosotros…. Y vivan los pediatras como Carlos Gonzalez y Rosa Jove, que nos reafirman en lo que hacemos (y que hacemos porque nosotros consideramos que debemos hacerlo, no porque lo hayamos leído en uno de sus libros) Ánimos, todo pasa y mejora. No conozco tu situación concreta, pero te veo fuerte, inteligente, luchadora y con carácter… Sigue tu senda, porque no te equivocas, se equivocan los demás (con todo derecho)
Mercedes, no te conozco de nada pero tu comentario me ha llegado al alma… llevo 2 años y medio sin dormir. Lo mio ya es crónico, fue tan duro al principio que ahora ya no duermo aunque la niña duerma y el cansancio acumulado sumado a las demandas normales del día a día me tiene por los suelos. Tus palabras me ayudan a confirmar que no estoy tan loca y que hay salida, que esto no va a durar para siempre y que vendrán momentos en los que pueda disfrutar de mi hija sin pensar en lo agotada que estoy o no sentirme culpable proque no hago todo lo que debería, o que debo estar haciéndolo todo mal si las demás madres están tan animadas. Por supuesto, crisis de pareja de por medio, tampoco iremos a por el segundo… no me veo con ánimos de correr el riesgo de pasar por todo esto otra vez, porque por mucho que digan la peor parte se la llevan las madres. Vaya por delante que adoro a mi hija, que daría mi vida por ella y que no volvería atrás porque no me imagino la vida sin ella, pero también somos personas, con necesidades físicas y emocionales que tenemos que cubrir al menos mínimamente… y asi voy yo, en piloto automático, como si fuese un movil con una rayita de batería… piediendo urgente que me conecten al cargador…
Nunca se sabe cómo será tu bebé, a mi si me lo hubieran contado no me lo hubiera creído, mi experiencia con Bebé es prácticamente opuesta a la que tuve con Mayor.
Muchísimas gracias por compartir tu experiencia, de verdad que te lo agradezco. Ánimo para ti también.
Wow!! Solo puedo decir que eres una valiente. Llevo siguiéndote desde que nació bebé y eres una mamá blogger realmente especial, en el fondo y en la forma. Se agradece infinito tu sinceridad en tratar tu dolor. De verdad. Gracias. Gracias. Gracias.
Muchísimas gracias Analactea 🙂
Desde mi escasíiiisima experiencia como madre, comparada con la tuya, solo puedo decirte que en este año y medio, he aprendido que todo lo que yo haga está bien. Vamos a ver, que no quiero que suene prepotente, obviamente me equivoco y acepto consejos.
Quiero decir que conozco mis límites. Y sé que la vida me da solo para algunas cosas, y no todas me interesan. Y que mis intereses no coinciden muchas veces con los del resto de los mortales.
En mi blog procuro poner también «malos ratos», como tú dices, porque quiero ser realista. La versión «feliz forever» de la maternidad que me llegó antes de parir, no me gustó nada una vez que vi de qué iba esto. Y desde mi blog, procuro que no se vea así. Eso sí, lo hago con un toque de humor, porque no me gusta el «llorar por llorar», y porque me sirve de catarsis mucho mejor: además de desahogarme, me cura 🙂
Una madre es aquella que ama y se preocupa por sus hijos. Y nunca jamás tus hijos estarán mejor con otra que contigo.
Los problemas que se prolongan en el tiempo son lo peor a nivel personal, de pareja… Pero a veces soltándolos se queda una un poquito mejor 🙂
Un abrazo!
Otro abrazo para ti Monstruua, muchas gracias por compartirlo 🙂 Besos.
Hola Eva y Felicidades por tu blog. Es uno de los más «reales» de la madresfera.
Te entiendo perfectamente. Tengo un bebé de 13 meses y nunca ha dormido bien, pero ahora duerme especialmente mal. Y te juro que si tengo que volver a oír al panadero, abuela o madre del parque aleccionarme sobre las «rutinas» y «la importancia del descanso de la madre» me pego un tiro. O se lo pego a ella. No soy imbécil. He hecho y desecho, he probado y vuelto a empezar. Rutinas y caos, pecho y biberón, con o sin siestas en mi cama y en la suya. Y en la del vecino si pudiera. Y no duerme. Nada. Así que, madres del mundo que tenéis bebes buenos y dormilones: disfrutad, pero en silencio.
Jajajaja Laura, muy bueno! 🙂
Te escribo desde el movil y exhausta, así que discúlpame por la brevedad. Quiero que sepas que te entiendo perfectamente y que, aunque lo sabes y no hace falta que nadie te lo diga, eres una madre estupenda. Yo no me puedo duchar, ni ir al baño, etc. y solo tengo un bebé AD.
Otra cosa, también tuve un blog en el que hablaba de mi maternidad y recibí mensajes similares a esos tuyos. Qué lástima me dan esas mujeres sin empatía que no son capaces de ver más allá de la bondad de sus nenucos.
Hola Vanessa, siento que recibieras mensajes como los míos 🙁 Ánimo en tu día a día, un abrazo.
Siento mucho por lo que estas pasando… Pero creo que todas pasamos en algún momento por lo mismo. Tengo dos hijas de las edades de los tuyos, y si bien no son de alta demanda, claro que son demandantes!! Mi esposo dice que yo las apaño y por eso hinchan tanto… En fin, que los últimos meses yo estaba abrumada, harta, impaciente, etc, y mis chicas empeoraban la actitud a medida que yo perdía la alegría. Yo no soy de dejarlas solas nunca, pero decidí que necesitaba un espacio para estar sola. Así que junte mis millas y me fui a EEUU al matrimonio de mi sobrina, pero sola. No te imaginas el bien que me hizo, y te mentiría si dijera que las extrañe. Me fui 6 días que para mi fueron como 2 meses de vacaciones en el Caribe. En serio. Volví recargada, energizada, alegre, paciente… Otra persona! Y la actitud de las chicas, con una madre así, claro que es otra. Responden mucho mejor, porque yo también respondo mejor. Mi casa parece una fantasía.
Ahora, mi esposo tuvo que apechugar durante mi ausencia, mi suegra ayudo muchísimo, y yo deje un plan diario coordinadisimo digno de la visita de un presidente. Las mamás del cole me ayudaron un montón, llevando a mi hija mayor al ballet, a los cumpleaños, o invitándola a sus casas a pasar las tardes. De la pequeña se encargó mi suegra. Tuve suerte.
Estando de viaje conversaba con las hermanas de mi cuñada, que tienen muchos hijos, y de verdad que me sirvió mucho ver la tranquilidad con la que manejaban a sus hijos. El aplomo y suavidad de su trato me reenfoco. Una cosa en especial la vi en ellas y la estoy aplicando en casa con mucho éxito: en vez de reñirlas, les digo lo que yo siento en ese momento. «Cuándo ustedes pelean yo me siento triste» «me estoy sintiendo muy enfadada porque me has pegado, creo que me debes una disculpa» y creo que al expresar lo que siento yo también me calmo y no levantó la voz. Me esta yendo de maravilla.
Lo otro que me funciona muy bien cuando pelean es decirles » si no pueden estar juntas, van a tener que estar separadas» y pasan el resto del día jugando solas, una en un lado de la casa y la otra en el otro lado. Cuando hago eso, dejan las peleas grandes por mucho tiempo… No les gusta nada estar separadas. En fin, como se dice, un consejo hasta de un conejo. Tomate un descanso, que te lo tienes bien merecido, cuando la mama está bien, todo mejora! Ánimo, súper mama!!
Hola Mar, muchas gracias por tu comentario. Yo nunca he necesitado esa escapada. Nunca hasta ahora! Pero para bien o para mal no me lo puedo permitir, no me refiero sólo a la economía o al trabajo, me refiero por ejemplo a que Bebé aún depende muchísimo de mi y no podría irme sabiendo que él iba a estar mal. En cuanto a lo que comentas de las peleas, yo también se lo digo y les separo, pero a ellos les da más o menos lo mismo, a veces me pregunto si se quieren o los celos que tienen se lo impiden. Un abrazo y gracias.
Hola! Siento llegar tarde, somos muchas las madres que pasamos por momentos así…Yo también tengo dos niños, uno de cuatro y una de dos, ambos recién cumpliditos. Son muy listos y súper traviesos y me llevan de cabeza. Para colmo estoy otra vez embarazada y me da vergüenza decirlo porque siempre me ven como una madre desesperada con estas dos fieras. Mi marido y yo estamos muy contentos con este nuevo embarazo sorpresa pero sabemos que va a ser muy duro, sobre todo para mi’. Ahora que empieza a notarse lo estamos diciendo y la mayoría de comentarios son muy duros. La carga es muy fuerte pero tengo que sacar fuerzas de donde sea. Me gustaría darte ánimos a ti y a todas las madres que estamos pasando por situaciones parecidas, somos ma’s fuertes de lo que creemos pero de vez en cuando necesitamos desahogarnos y salir de nuestro escondite. Los niños son capaces de sacar lo mejor y lo peor de nosotros, vamos a intentar vivirlo con filosofía, que crecen rápido y ya tendremos tiempo de estar solas…