Cómo afecta el calor a la calidad del sueño
De la mano de Ecus Kids, empresa dedicada a la fabricación y venta de equipos de descanso para toda la familia, voy a escribir de forma periódica sobre temas relacionados con el sueño y el descanso, centrándome especialmente en los niños y en cómo repercute dormir adecuadamente en tener una actividad saludable durante el día.
Para esta primera entrada me estaba reservando hablar de cómo afecta el calor y el mayor número de horas de sol que tenemos en verano en nuestros hábitos de sueño. Es un tema que he mencionado varias veces en este blog y del que habitualmente me quejo en twitter porque tanto mi hijo como yo somos unos damnificados del verano en cuanto al sueño se refiere.
Los expertos aseguran que la temperatura ideal para dormir está entre los 18 y los 22 grados centígrados. Por encima o por debajo de esa temperatura el cuerpo humano no logra alcanzar la profundidad de sueño que es necesaria para descansar adecuadamente por lo que se producen muchos micro-despertares durante la noche, el sueño es mucho menos profundo (lo que provoca que no se descanse totalmente) y no es extraño que llegue el insomnio.
El primer verano de mi hijo ya notamos una gran diferencia en su forma de dormir. Empezó a acostarse más tarde, le costaba conciliar el sueño, sudaba a mares y aunque se despertaba varias veces durante la noche, no recuperaba esas horas de sueño por la mañana. Este segundo verano de vida está batiendo récords en cuanto a hora de acostarse: raro es el día que cae antes de las 23.30h. Al igual que el verano pasado, suda muchísimo y tiene el sueño muy ligero. Este año lo se a ciencia cierta porque duerme con nosotros y compruebo que noche tras noche da muchísimas vueltas, no para de beber agua y es ya casi al amanecer cuando suele caer más profundo.
¿Cómo le afecta a mi hijo el dormir peor?. El año pasado la irritabilidad era clara. Este segundo verano, donde la comunicación ya es mejor, me queda claro que se levanta cansado y sin ganas de hacer nada. Algunas veces hasta se me tumba de nuevo en el sofá mientras desayuna y no es rara la mañana que no quiere bajar a la calle o que cuando bajamos no quiere bajarse de la silla de paseo para jugar un rato en el parque.
Yo no ando mucho mejor. El verano me mata, los más de 28 grados que tenemos muchas noches en el dormitorio no me permiten dormir más de cuatro o cinco horas y de forma habitual soy incapaz de dormir antes de las 3 o las 4 de la madrugada. La siesta, algo que durante años he despreciado, se ha convertido ahora en mi gran aliada, pero una vez llegada la noche, no es sino una dificultad más para conciliar el sueño. La falta de sueño no sólo me provoca las inevitables ojeras sino que agudiza mis dolores de cabeza, me produce irritabilidad y sufro muchos más despistes de los ya habituales en mi.
Dormir bien es imprescindible para poder estar descansados al día siguiente y los niños no son una excepción. Por eso se recomienda intentar dormir en una habitación lo más fresca posible, no abrigarse, hidratarse convenientemente e intentar seguir unas rutinas que permitan que nuestro ciclo de sueño se vea lo menos alterado posible.
Yo estoy soñando ya con volver a dormir bajo un nórdico ¿y vosotros? ¿os afecta el calor a la hora de dormir?.
Pues sí. El calor del verano es agotador. Menos mal que la piscina y el aire acondicionado ayudan bastante.
Es cierto, yo durante el día tengo el aire a todo trapo pero por la noche no lo aguanto así que no me queda otra que aguantar.
Hola! Muy bien este post… y me toca de cerca: nosotros odiamos el calor! Mi hija sobretodo, porque suda mucho, no está a gusto y se pasa el día diciendo «Calor, no!!!» sobretodo cuando tiene que entrar en el coche y está como un horno! Yo la entiendo porque estar sudando todo el día es un calvario. Yo no entiendo como la gente se puede ir de vacaciones a lugares a 40 grados! Lo nuestro es más ir hacia el norte, para poder dormir, descansar, y hacer aquello que me gusta tanto que es ponerme un jersei cuando cae el sol!!! Nuestros hijos se harían amigos! 🙂
Jajaja, sí, mi hijo es tan caluroso como yo!!!. Yo tampoco sé cómo la gente aguanta el calor, es en Madrid y todos los veranos pienso en emigrar…
Nosotros los veranos los pasamos en el norte para evitar el calor, ahora mismo estamos durmiendo con pijama de invierno de los gordos y manta y la verdad es que es una gozada, el peque duerme mucho mejor y asi está luego de mejor humor.
De buena gana me iba yo al norte. Qué ganas tengo que pillar un pijama de invierno!!!
Sí que me cuesta más dormir pero sabiendo que me espera una mañana soleado me levanto de mejor humor que en invierno, jeje. Eso sí, yo no puedo dormir ni con aires acondicionados ni ventiladores… menos mal que aquí por la noche refresca.
Yo tampoco puedo con los ventiladores ni mucho menos con el aire acondicionado para dormir así que no me queda otra que sudar porque aquí no refresca nada!.
Por eso este verano estoy tan encantada porque casi no hace calor, al menos por aquí. Y de noche se duerme de maravilla!!
En julio hemos tenido una temperatura bastante aceptable en Madrid, ahora es cuando está pegando y se hace complicado dormir.
A mí me pasa igual, además tengo la dichosa manía de no poder dormir sin pijama ni destapada… Encima, mi marido se transforma en calentador por las noches!
Al final hemos optado por poner el aire acondicionado antes de empezar a cenar, para que se enfríe el piso, y justo antes de acostarnos lo apagamos. Así nos dormimos fresquitos, y ya luego no solemos despertarnos…
A mi es que eso que hacéis no me funciona. Aquí está el aire puesto hasta el último minuto pero en cuanto lo apagas va subiendo la temperatura y en 10 minutos ya tenemos los dichosos 28 grados.
Yo soy super calurosa, recuerdo el verano pasado embarazada, horrorso, y dando el pecho… unos sofocos que me daban… menos mal que parece que ya la cosa se ha normalizado.
Siempre digo que prefiero el invierno y la gente me mira con cara de esta tía está loca.
A nosotros nos regalaros mi padres una bomba de calor, que nos vino de perlas en verano, porque antes de eso, como dices, yo dormía fatal, es que no podía. Por otro lado no es que me gusten muchos los aires acondicionados, y menos con la nena, pero es que sino me pasa como a tu hijo, no tengo ganas de nada y estoy todo el día cansadísima. A mi el calor me aplatana.
Los sofocos fueron también mis fieles compañeros!!! A mi también me toman por loca pero, oye, cada cual tiene sus gustos… Yo estoy convencida de que si la gente tuviera la tensión tan baja que tengo yo y sudaran tanto, tampoco les gustaría el verano.
Pues chica aquí seríais felices, porque el calor está brillando por su ausencia este año… Con decirte que esta semana hemos empezado a dormir destapados…Os compadezco la verdad, recuerdo perfectamente lo que es intentar dormir en Madrid en agosto… En fin, la ventaja de no disfrutar de lo bueno del verano es que generalmente también te pierdes lo malo 😉 Besos y que sea leve!
totalmente de acuerdo contigo, yo llevo todo el verano durmiendo con pijama ligero y edredon, que ganas tengo de dormir destapada!! a los madrileños y barceloneses os compadezco!!
Ais, qué envidia!.
Muy bueno! jajaja El verano, afortunadamente para algunos, es corto. Y en Madrid tenemos muchas horas de sol todo el año, creo que no nos podemos quejar mucho de clima.
Y eso que este verano no está siendo como el anterior! En mi casa de los tres el más caluroso es mi marido, aunque el peque también se revuelve bastante en la cama las noches calurosas. Ánimo que queda menos para septiembre!
Sí, aunque en septiembre también hace mucho calorcito, eh?.
Yo con calor no puedo pegar ojo! Afortunadamente, en mi ciudad por mucho calor que haga, lo normal es que por la noche refresque, así que se duerme bien.
Pero cuando vamos de vacaciones a casa de mi suegra, es un horror! Por algo se dice que en el infierno hace calor! Hace unos treinta grados por la noche dentro de la habitación, así que os podeis imaginar, no hay quien duerma!
Te comprendo porque esa es la temperatura que tenemos habitualmente en nuestro dormitorio, entre 27 y 29 grados todas las noches del verano. Es inhumano.
El ventilador, si se pone de forma que no le a nadie, mueve el aire y consigue algo más de fresco. Sino, poner al aire a tope y apagarlo justo antes de meterse en cama. La evaporación también es tu amiga, fregar bien mojado con agua bien fría, o tender ropa en la habitación. La evaporación refresca mucho (y como madrid es muy seco pues también compensa la sequedad).
Y luego los trucos tipo ducha fría o líquidos fríos antes de acostarse, rebajan la temperatura corporal.
Muchas gracias por tus consejos, no tenía ni idea de algunos de ellos. Bueno, te diré que los del aire lo hacemos pero nada, en 10 minutos vuelve a la temperatura ambiente, useasé, más de 28 grados. Anoche tuvimos 29 grados en la habitación hasta las 6 de la mañana, horroroso, vamos.
Puedes probar con el ventilador orientado hacia alguna tela húmeda, cerrar las persianas, evitar tener encendidos los aparatos que generan calor, cambiar las bombillas antiguas por de esas nuevas económicas (que también generan menos calor), crear una corriente de aire si es posible. Las paredes y los muebles acumulan calor que sueltan por la noche, si se pueden refrescar, por ejemplo pasándoles un trapo un poco húmedo, también limita la temperatura.
Existen películas que se pegan en las ventanas y dejan pasar menos el calor.
No todos los consejos son fáciles de aplicar ! Pero combinandolos, se puede conseguir un buen resultado. Las persianas y la evaporación son lo más eficaz. Si no entra el calor y consigues refrescar el suelo, seguramente el aire puesto antes de irse a la cama mantenga la temperatura fresca más tiempo. Por probar que no quede 😉
Muchas gracias, no te creas que caen en saco roto, intentaré aplicar algunos de tus consejos, a ver si consigo algo porque no hay quien pare en este horno!! jaja
Hola. Pues yo lo tengo bien complicado viviendo donde vivimos… Panamá, país tropical donde los haya. Los meses más calurosos suelen ser abril y mayo donde el calor puede literalmente agarrarse con las manos. Nos salva el «abanico»-ventilador que ponemos cara a la pared. Ahora estoy de 17 semanas. Confío en que mi niño venga preparado para los calores de su país de nacimiento.
Saludos 🙂
Yo pasé el verano de 2009 embarazada de mi hijo, de 7-8 meses. Y sudé lo que no había sudado en mi vida pero realmente no sé si fue por el verano o qué porque con 16 semanas empecé a tener sofocos y así estuve hasta que mi hijo ya tendría cerca de 4-5 meses jajjajaa
Me encanta el calor, sufro muchísimo en invierno con el frio y la lluvia. Aquí en Galicia no tenemos el problema del calor sofocante, puede haber unos días seguidos con calor pero es muy raro que pasemos de los 35º. Este verano está siendo horrible para mi, en julio sólo la mitad del mes pudimos ir a la playa y la primera semana de agosto nada de nada, ayer lloviendo toda la mañana. De hecho le digo a mi marido que como en septiembre, que es cuando tengamos vacaciones no haga buen tiempo, nos bajamos al sur a pasar unos días…
Yo sería feliz en una zona de mal tiempo aunque comprendo perfectamente que cuando no ves la luz del sol en semanas es muy agobiante y termina afectando también al estado de ánimo. En Madrid tenemos la suerte de tener, normalmente, inviernos soleados y es un gustazo tener mucho sol pero fresquito. Para mi el único problema del norte es la humedad, que me afecta a la alergia.
Yo estoy igual, paso la noche con el ventilador, pero aún así duermo poco y mal, y el lechón está cayendo a las once de la noche y se despierta tempranísimo… así que voy arrastrada, despistada y hay días que hasta con la lágrima fácil de puro sueño
Te comprendo perfectamente. Menos mal que son poquitos meses, que en España tenemos más invierno que verano.
Sí que me afecta, muchísimo, es la peor época del año para casi cualquier cosa. Antes de conseguir dormirme me ducho con agua fría por lo menos dos veces. Es un sin vivir. Sin duda quiero que vuelva el tiempo en el que taparme con el nórdico sea mi única preocupación para irme a dormir.
Te entiendo, Verónica, y me alegra que lo digas porque no es muy común, la gente suele adorar el verano, a mi me parece también un sin vivir. Besos.
Yo llevo bastante bien el calor pero si que es verdad que en Sevilla es asfixiante algunos días, menos mal a la piscina y el aire por el día. Por la noche como no nos gusta poner el aire acondicionado lo que hemos hecho es poner un ventilador de techo y la verdad que estamos durmiendo bastante bien este verano… Eso si ponemos el aire un rato antes de irnos a dormir para que el cuarto este fresquito y con el ventilador de techo entonces es suficiente. Dormir con calor es horrible…
Juer, es que si viviendo en Sevilla lo llevárais mal… De los ventiladores de techo me han hablado muy bien, no sé si realmente me gustaría uno porque los de suelo no me van para dormir, pero sería cuestión de probar…
A nosotros el calor nos afecta muchisimo.. a los tres!!!
Como a nosotros, entonces!.
Afortunadamente, en mi ciudad rara vez alcanzamos temperaturas elevadas durante la noche. Pero algún verano hemos ido a Torrevieja y hemos jurado no volver porque no hay quien duerma
Jajaja, cómo te comprendo!.