Mindfulness para niños: empezamos con Mayor

Mindfulness Niño concentrado

Hace años que no me prodigo en detalles sobre cómo se encuentra Mayor. Tanto que muchos no habéis reparado en que una de las categorías del blog se llama «Atención Temprana«, en la que hace siglos que no escribo. En parte es buena señal, desde luego. Y en parte se debe a que como garante de su intimidad siento que hay muchas que no debo contar en un blog que ya tiene poco o nada de anónimo. Ni de él ni de su hermano. Es un poco limitante, sí, pero debe ser así.

No es que hoy vaya a hacer una excepción pero sí que voy a dar alguna pincelada para explicar por qué nos decidimos a iniciar las sesiones de Mindfulness para niños.

 

¿Qué es el Mindfulness?

Además de una palabra que a mi me parece preciosa, Mindfulness se suele llamar también «atención o conciencia plena«. Significa que la persona está concentrada en si misma, que es consciente de sus sensaciones, de sus emociones, de sus pensamientos.

Hasta donde yo se, tiene su origen en las técnicas de meditación budistas, aunque es una «terapia» totalmente laica. Se trata de tomar conciencia de la realidad: de uno mismo y del entorno.

En un mundo de tensión, estrés y distracciones constantes, el tener una «atención plena» ayuda a reducir los nervios y también a conocernos mejor, ser más creativos, integrar nuestros sentimientos y, en definitiva, mejorar nuestra inteligencia emocional.

 

Y, ¿se puede hacer Mindfulness con niños?

Hace años, cuando empezamos a oír hablar sobre Mindfulness, yo sólo lo conocía para adultos pero, afortunadamente, vivimos en una sociedad cada vez más abierta a la atención a la infancia y, sí, meditar también está al alcance de los niños y el juego es un estupendo conductor de los procesos emocionales y psicológicos.

Aunque cualquier niño puede hacer Mindfulness, está especialmente indicado en niños que son nerviosos, que tienen dificultades para concentrarse o para tener autocontrol, para mejorar su autoestima y sus relaciones con los demás.

Como me explicaron cuando estuve informándome, no se trata de que un niño que se mueve mucho deje de moverse sino de que el niño tome conciencia de si mismo y sea consciente de que se mueve, porque con esa conciencia de que está moviéndose podrá decidir frenar y averiguar por qué necesitaba ese movimiento.

 

La experiencia de Mayor en Mindfulness

Mayor lleva dos sesiones de un programa de ocho. Aún es pronto para valorar nada aunque, desde luego, va encantado y parece muy consciente de que lo que va a hacer allí es juego pero, también, ayuda para su vida diaria.

El grupo al que él acude es un grupo muy muy reducido donde con una terapeuta se plantean juegos, audiciones, etc.

Como yo no estoy en las sesiones y Mayor no es mucho de contar cosas, no dispongo de muchos detalles sobre lo que hacen dentro, pero sí os puedo poner un ejemplo de juego para hacen para estimular la mente: fingir ser un marciano que acaba de llegar a la Tierra y está conociendo por primera vez, pongamos, el agua. Hay que mirar el agua, olerla, medir la temperatura, saborearla, tocarla, pensar cómo te sientes al beberla. Se trata de utilizar todos los sentidos y tratar de describirlo con detalle, concentrándose en sus características.

Personalmente creo que va a ser un programa muy productivo, que espero que no sólo ayude a Mayor a ser más conocedor del torrente de sentimientos que, aún hoy, a veces le desborda, sino que espero también que le proporcione herramientas para poder centrarse en lo importante y mejorar el autocontrol (y nos las proporcione también a nosotros para ayudarle).

Por cierto, que hay un libro interesante sobre meditación para niños que quizá algunos ya conoceréis: Tranquilos y atentos como una rana, de Eline Snel.

El programa se va a extender de aquí a fin de año, así que os contaré más adelante cuál es nuestra experiencia final con el Mindfulness para niños.

Foto | John Morgan en Flickr CC

Mamá (contra) corriente

Este mi blog personal. Hace ya diez años que empecé a escribir sobre la increíble experiencia que la maternidad había supuesto en mi vida ¡y desde entonces aquí sigo!Soy autora del e-book "Cómo lograr un embarazo conociendo tu fertilidad", en el que reúno los conocimientos teóricos y prácticos que necesitas para entender tu ciclo menstrual, interpretar tus signos de fertilidad y utilizarlos para maximizar tus posibilidades de quedarte embarazada.Además de este blog que lees, soy co-editora de Comer con Gusto y autora de otros tres blogs: Pekeleke, mi web de literatura infantil, Miss Cosméticos, mi blog de belleza y Mochilas-Portabebés.es, sobre mochilas ergonómicas.

5 comentarios sobre “Mindfulness para niños: empezamos con Mayor

  • el 28/10/2015 a las 9:43
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    Uff, suena tan interesante que me apetece participar hasta a mí. ¿En qué tipo de centros se realiza? No sé si por aquí cerca tendremos la posibilidad de encontrarlo. De todas formas la mía es un poco pequeña, pero nos vendría bien a las dos.

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  • el 28/10/2015 a las 17:22
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    Me parece algo muy interesante, de hecho cuando te empezaba a leer anoche en el móvil me acordaba del libro que tú también mencionas, y que tengo en mi lista de libros que me llaman la atención para dentro de un tiempo (mi hijo cumple los cuatro años en diciembre). Como madre me parece fundamental fomentar en mi hijo una buena autoestima, que sea sociable (más siendo hijo único) y también que sea capaz de concentrarse y jugar solo, algo que ha empezado a hacer hace pocos meses.

    Durante unos años fui monitora de niños, y recuerdo una excursión en la que después de comer conseguí que más de veinte chiquillos de diversas edades se sentaran en el suelo y haciendo ohhhhmmmm se relajaran durante creo que fue casi media hora. Yo misma no me lo podía creer, pues no tengo ningún conocimiento de estos temas, fue todo muy intuitivo, pero me gustaría aprender más para mi día a día y quizá dentro de un tiempo buscar en mi ciudad algo similar a lo que cuentas. Esperaré de todas formas con ganas que nos vayas contando qué tal va resultando con Mayor.

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  • el 29/10/2015 a las 9:43
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    Esto parece algo cuyos resultados se pueden apreciar más a largo plazo. Espero que a Mayor le vaya bien, ya irás contando.

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  • el 29/10/2015 a las 12:51
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    Me parece muy interesante el tema del mindfulness. También tengo ese libro en mi lista de pendientes. Para meditación para niños, me parece muy bueno uno que se llama Luz de estrellas, de Maureen Garth, yo lo he utilizado con mi hija para hacerlo en la cama antes de dormir, nos imaginamos una estrella cada una, vamos andando por el campo, vemos animales…

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  • el 29/10/2015 a las 15:31
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    Yo también creo que son terapias cuyos resultados se irán viendo a largo plazo. A ver que tal le resulta a Mayor y como se va acoplando a vuestra rutina.

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